Si sois aficionados a juegos de la colección bichos como Polilla Tramposa, Sopa de Bichos y Póquer de Bichos, seguro que os ilusiona saber que El Tango de la Tarántula, un nuevo juego para la colección, será la próxima apuesta de Devir. En él, tendremos que quedarnos sin cartas para ser el ganador, pero de una manera muy especial…

ASÍ SERÁ EL TANGO DE LA TARÁNTULA

Devir ha anunciado, a través de su página de Facebook, que El Tango de la Tarántula (Tarantel Tango en su versión original) contará con su versión en castellano a partir de la próxima semana. Se trata de un divertido juego de cartas de 2 a 5 jugadores, publicado por la editorial alemana Drei Magier Spiele, que ofrece rápidas partidas, de 15 minutos de duración.

El objetivo, además de echarnos unas risas en cada partida, es ser el primer jugador que se deshaga de todas las cartas de la mano. Para ello, tendremos que activar nuestra rapidez mental, nuestra capacidad de reacción e ¡imitar el sonido de los aninales! Y es que, El Tango de la Tarántula se compone de 120 cartas, entre las que se encuentran burros, vacas, perros y gatos.

UNA PARTIDA A EL TANGO DE LA TARÁNTULA

Antes de comenzar la partida, se coloca en el centro de la mesa la carta especial de tarántula, que posee forma pentagonal, y se reparten las cartas a cada jugador. A continuación, por turnos, los jugadores irán colocando la primera carta de su mazo alrededor de la gran tarántula.

Las cartas, que representan a diferentes animales con sonidos fáciles para imitar, cuentan con un animal en su parte central. Sin embargo, también presentan el dibujo de una o dos arañas, que nos indicará el número de veces que tenemos que hacer el sonido del animal. Así, los jugadores deberán imitar correctamente al animal de la última carta colocada para poder colocar la suya. Si la carta que nos toca imitar es un perro con una pequeña araña dibujada, sólo tendremos que decir ‘Guau’ una vez, dos veces si hay dos arañas y ninguna si no aparecen arañas en la carta.

Por su parte, también existen cartas que poseen dos animales. Con ellas, se indica que el siguiente jugador tiene que colocar su carta dos puestos hacia delante, y no a continuación, como ocurre con las cartas normales. Con todo ello, los jugadores colocarán sus cartas imitando (o no imitando) los sonidos de los animales correspondientes a la última carta, atendiendo a las pequeñas arañas y a las cartas de doble animal. Esto requerirá una gran atención, dado que no es tan sencillo como parece y no está permitido el tiempo para pensar.

Por último, hay una carta que dará aún más emoción a las partidas. Esta carta, representada por una tarántula, indica que los jugadores tendrán que golpear rápidamente el centro de la mesa. El último que lo haga deberá llevarse todas las cartas que estén sobre la mesa. La partida continúa hasta que un jugador se quede sin cartas, convirtiéndose en el ganador de la partida.

Aunque se trata de un juego con reglas sencillas, a la hora de la verdad veremos como no es tan fácil quedarnos sin cartas. Cada vez que tardemos demasiado en imitar a un animal, que nos equivoquemos en su sonido o en las veces que hay que imitarlo, que coloquemos una carta en un lugar incorrecto o que seamos los últimos en golpear la mesa con la carta de tarántula, ganaremos más cartas, que nos irán alejando de la victoria.

Así, ya podemos ir practicando nuestra rapidez con los juegos de la estantería de la colección bichos, dado que El Tango de la Tarántula promete hacernos meter la pata una y otra vez, por muy atentos que estemos. Pero eso sí, nos sigue quedando una duda más. ¿Será Kakerlakentanz el próximo de la colección en ser traido a España por Devir?