Las últimas extracciones de petróleo están más cerca de lo que imaginamos. La grandes compañías petrolíferas tendrán que invertir en nuevas tecnologías, pero antes, deberán explotar al máximo los pozos. Sin esta tarea, que les proporcione fondos suficientes, poco podrán hacer en la época del cambio.
Aunque esta situación guarde ciertas similitudes con la realidad, por el momento, forma parte del argumento de Peak Oil. Este juego de mesa se prepara para iniciar su campaña en Kickstarter, que supondría su salto a las mesas de juego.
PEAK OIL EN KICKSTARTER
Peak Oil es un juego de mesa de 2 a 5 jugadores, con partidas de 45 a 75 minutos de duración. Recomendado para mayores de 10 años, recurre al tablero, a las cartas y a los marcadores como principales aliados.
Tobias Gohrbandt y Heiko Günther son los autores del juego. Este último también es el responsable de su diseño e ilustraciones. La editorial española 2Tomatoes está al frente del proyecto y tratará de convertirlo en una realidad a través de una campaña de búsqueda de financiación en Kickstarter.
Tal y como acaba de confirmar a través de las redes sociales, será el 30 de marzo cuando se inicie. Por el momento, se desconoce cuál será el objetivo inicial o el precio del juego para los mecenas. Si se supera ese objetivo, llegaría a las tiendas en los próximos meses para situarse junto a Lord of the P.I.G.S., The Walking Dead: All Out War y Guilds of London, sus juegos ya publicados.
PEAK OIL: ‘SET COLLECTION’ Y COLOCACIÓN DE TRABAJADORES
En una combinación entre los géneros ‘set collection’ y colocación de trabajadores, Peak Oil es un juego competitivo, cuyo ganador será el que posea la mayor cantidad de puntos al final de la partida. La libertad de acciones será la clave a la hora de decidir cuándo fastidiar al rival.
Hace ya un año, probamos su prototipo. Supimos, así, que los jugadores se pondrían en la piel de magnates de poderosas compañías energéticas. Con el objetivo de seguir manteniendo la hegemonía en una situación crítica, se crearía una dura competición, orientada hacia cinco acciones.
La extracción de barriles de los últimos pozos petrolíferos permite enviar el crudo a centros de refinado. Estas tareas resultan fundamentales a la hora de obtener dinero, cuya cantidad dependerá de la ruta escogida y del marcador de demanda. Las inversión, el marketing y la expansión se conforman como las acciones restantes.
Mientras que la primera permite pagar para adquirir una tecnología, la segunda simula una campaña de comunicación. La compañía tendrá que concienciar a la población de la importancia de su nueva tecnología. Tras hacerlo, aumentará el valor de la misma. Al igual que en la vida real, es habitual informar acerca de los peligros de otra tecnología que, casualmente, pertenece a una empresa rival.
Por último, la expansión permitirá trasladar agentes al cuartel general o moverlos de una tarea a otra. Todas las tareas con agentes se activarán, por última vez, cuando se extraiga el último barril del pozo petrolífero. Los países habrán cancelado sus contratos con las compañías petrolíferas, apostando ya por las nuevas tecnologías.
