Fast Food Fear!: ¿por qué los monstruos tienen tanta prisa?

Fast Food Fear!

Hace unos días, Devir utilizaba las redes sociales para anunciar uno de sus próximos lanzamientos. Con el nombre de Fast Food Fear!, encontramos un juego de edición propia, ambientado en un restaurante de comida rápida. Unos monstruos impacientes se convierten en los principales clientes.

 

ASÍ SERÁ FAST FOOD FEAR!

Fast Food Fear! es un juego de cartas de 3 a 6 jugadores, con partidas que rondan los 15 minutos de duración. Recomendado para mayores de 8 años, es una creación de Dario Dordoni, autor italiano especializado en juegos de mesa de temática gastronómica. Sus ilustraciones corren a cargo de Demis Savini.

Devir es la responsable de su edición original y, tal y como anuncia a través de las redes, será justo antes de verano cuando aterrice en las tiendas. A la espera de que llegue ese momento, ya se conocen detalles en torno a su temática y a sus reglas.

En esta novedad, los jugadores estarán a cargo de un restaurante de comida rápida. Éste se ubica en el reino de los monstruos, por lo que tendrá como clientes a criaturas de todo tipo.

Éstas cuentan con gustos muy diferentes, pero con una particularidad en común: no les gusta que les hagan esperar. Tal vez sean «personas» de negocios, tengan una cita después o quieran invertir toda la tarde en una larga siesta. Al fin y al cabo, ¿a quién le gusta que le hagan esperar por un menú de hamburguesa?

Definido como una carrera cooperativa a contrarreloj, la coordinación entre todos los participantes será clave a la hora de servirles el menú a todos los monstruos. De lo contrario, no podrán obtener la victoria.

Tras formar una fila de monstruos con las cartas de su respectivo mazo y repartir a cada uno su mano inicial, se le da la vuelta al reloj de arena. La misión habrá sido un éxito si consiguen atender a todos los clientes de la fila antes de que se agote el tiempo. Durante su turno, cada uno podrá llevar a cabo una acción, a escoger entre tres.

1. Descartar una carta de la mano para robar otra del mazo.

2. Servir a un cliente. Se descartan todas las cartas de comida que el monstruo reclama para atenderle y eliminarle de la fila.

3. Utilizar una carta de acción de la mano. Éstas otorgan ventajas al grupo, ya sea a la hora de coordinarse o para ampliar el tiempo.

Esta mecánica de juego crea una apuesta rápida, en la que disputar varias partidas seguidas. Su rejugabilidad se potencia con las diferentes cartas de monstruo, así como por el azar de esa mano inicial. Con ello, promete enganchar a los que buscan títulos cooperativos, sencillos y rápidos, con el estrés como principal ingrediente.