Augustus, finalista a Juego del Año 2013

Ya os hemos presentado a Hanabi, el juego de cartas ganador de Spiel des Jahres 2013 (Juego del Año) y a Qwixx, el juego de dados que se quedó a las puertas de la victoria. Hoy os traemos a Augustus, el otro finalista de la misma categoría, que hará las delicias de los apasionados de la suerte en los Juegos de Mesa. Por su parte, su ambientación romana es uno de los aspectos más atrayentes.

Augustus
Augustus es un juego de 2 a 6 jugadores, valorado en 30 euros.

COMPONENTES DE AUGUSTUS

Augustus es un juego de cartas y losetas, de 2 a 6 jugadores, con partidas de 30 minutos de duración. Su precio ronda los 30 euros y, en su gran caja se incluyen cartas de objetivo, losetas cuadradas, losetas redondas de legión y varias figuras de madera, similares a las del Carcassone, pero con forma de legionario. Además, también incluye una práctica bolsa de tela para guardar las losetas redondas, dándole así a los factores suerte y azar un valor muy importante.

En Augustus, César Augusto, heredero de Julio César, se ha convertido en el primer emperador. Haciendo uso de sus poderes, ha decidido dividir el Imperio en provincias y enviar a su legado a ellas para mantener el orden. Cada uno de los jugadores asumirá el papel de estos enviados, tratando de cuidar al máximo de sus provincias.

Augustus
Ejemplo de partida de Augustus. Foto: boardgamegeek.com

CÓMO JUGAR A AUGUSTUS

Al comienzo de cada partida, se repartirán tres cartas de objetivo a cada jugador. En cada una de las cartas hay un número diferente de símbolos, en la parte izquierda, que cada jugador deberá ir completando conforme se extraigan losetas redondas de la bolsa. Cuando salga de la bolsa un símbolo que se encuentre en alguna de las cartas de objetivo, el jugador colocará su ficha de gladiador encima del símbolo de la carta, utilizándolo como marcador. En caso de que ese símbolo de la loseta redonda se encuentre en más de una carta, sólo podrá tacharse uno.

Cartas
A la izquierda de las cartas de objetivo se encuentran los símbolos para marcar. A la derecha, la recompensa. Foto: Outcast.it

Cuando todos los símbolos de una carta hayan sido marcados, se deberá gritar «¡Ave, César!», haciendo alusión a la temática del juego y se podrá optar a un beneficio, como losetas de bonus (las cuadradas) o a puntos al final de la partida. Estas losetas de bonus, en algunas ocasiones, podrán robarse entre jugadores. A continuación, escogerá otra carta de objetivo, de forma que el jugador vuelva a tener tres encima de la mesa y teniendo en cuenta que no todas tienen la misma dificultad y que no reportan los mismos puntos.

En el momento en el que un jugador complete su séptima carta de objetivo, la partida se dará por finalizada y tendrá lugar el recuento de puntos, teniendo en cuenta también las losetas cuadradas. De esta manera, la suerte tiene un papel fundamental con las losetas redondas extraídas de la bolsa. Sin embargo, la habilidad también es imprescindible para alcanzar la victoria, puesto que un jugador deberá elegir entre cartas de objetivos fáciles de completar que supongan pocos puntos al final de la partida o entre cartas de objetivos difíciles, que otorguen una mayor puntuación en caso de ser completadas.