Nuevamente gracias a los divertidos Mag TV de 5 Minutos por Juego hemos podido enterarnos de que Pick-a-Pig y Pick-a-Dog, dos juegos combinables, contarán con una edición en castellano de la mano de Homoludicus, que se pondrán a la venta en los próximos meses bajo los nuevos nombres Pick-a-Cerdo y Pick-a-Perro.
PICK-A-CERDO Y PICK-A-PERRO
Pick-a-Cerdo y Pick-a-Perro son dos juegos de cartas combinables con la misma temática, pero protagonizados por cerdos y por perros, respectivamente. Con cada uno de ellos, podremos disputar partidas de forma individual o de hasta 5 jugadores, de 15 minutos de duración, aunque pueden ampliarse si juntamos los dos.
El objetivo es tan sencillo como sus reglas: utilizar la rapidez visual y mental para conseguir el mayor número de cartas al final de la partida. Para coger una carta de la mesa, basta con encontrar la carta que sea idéntica o que se diferencie en sólo una característica con la que se encuentre encima de nuestro mazo. ¿Os suena su argumento? Los que conozcáis el clásico juego Formissimo quizás os hayáis dado cuenta de que se trata de una divertida adaptación.
UNA PARTIDA…
Para empezar a jugar, colocamos 30 cartas en la mesa (6 cartas de ancho y 5 de largo). Después, cada jugador recibe una carta más, que colocará delante suya. Para poder jugar necesitamos saber que estos dos juegos tienen cinco rasgos diferentes en las cartas (seis si combinamos los dos).
Así, los animales se diferencian por su tamaño (grandes o pequeños), por su color (grises o rosas), por su número de brazos (dos o uno), por sus complementos de moda (macarrillas con gafas o sin ellas) y por los objetos que tengan (algunos han salido del cine y no se han acabado las palomitas y otros sí). Además, como ya hemos explicado, si combinamos ambos juegos saldrá un rasgo más a tener en cuenta: la nariz, que puede ser de perro o de cerdo.
Dicho esto, podemos empezar a jugar. Todos los jugadores a la vez miramos nuestra carta y buscamos en la cuadrícula una que tenga sólo un rasgo diferente o que sea completamente idéntica. Cuando la encontremos, la cogemos y la ponemos encima de la anterior que teníamos. Ahora, esta última carta servirá de base para buscar una igual o una con un rasgo distinto. Podéis guiaros en la imagen de arriba si tenéis alguna duda.
Así seguiríamos hasta que un jugador no pueda coger ninguna carta de las que hay en la mesa del juego. En ese momento, dirá ‘Stop’ y procederemos a comprobar que no puede coger más. Si tiene razón, se cuentan los puntos de todos los jugadores, teniendo en cuenta que cada carta es un punto, y el jugador que ha interrumpido la partida con un ‘Stop’ recibe un punto extra. Si por el contrario el jugador que ha parado el transcurso de la partida podía coger alguna carta, pero no se ha dado cuenta, este jugador pierde todos sus puntos de la ronda y los demás hacen su recuento de forma normal.
A pesar de que Pick-a-Pig y Pick-a-Dog son dos juegos muy sencillos de entender, no resulta fácil saber qué carta coger en cada momento. Además, la presión por saber que no podremos seguir jugando la ronda en caso de coger una carta equivocada, será otro punto que nos complicará aún más la existencia.