My Tower, My Home reproduce esa sensación de jugabilidad que daban en su momento los Tower Defense. Da un paso más allá con una vuelta de idea, pero con el mismo fin. En este título atacan nuestra casa, representada en forma de torre.

Nuestro deber es, con ello, defenderla a toda costa. Nada más iniciarlo comprobamos que los colores oscuros predominan, en perfecta combinación con la sencillez. Creado por el estudio independiente argentino Shoor Games, podéis descubrir más sobre él en este análisis.

SUBIR DE NIVEL Y ADMINISTRAR LAS DEFENSAS

My Tower, My Home acaba de ponerse a la venta, en sus versiones para Windows, Mac y Linux. Está disponible a través de Steam, a un precio de 6,99 euros.

Podríamos definir tres aspectos indispensables para alcanzar la gloria, que a su vez explican la esencia del juego. El primero de ellos es administrar las defensas de la torre comprando lo que podamos, según nos permita nuestro dinero.

Al subir el nivel de nuestro personaje, tendremos que ir asignándole puntos para que se vaya haciendo más fuerte y hábil. Por último, es necesario acabar con todas las amenazas en forma de enemigos que acechan nuestra querida torre.

La acción y la gestión de recursos se unen en My Tower, My Home, aportando un plus más allá de matar enemigos. Sus gráficos en dos dimensiones plasman a la perfección la idea de Shoor Games.

Para empezar a jugar, además del nivel de dificultad que varía entre fácil, normal y difícil, hay que tener en cuenta que este juego engancha y mucho. Antes de comenzar recomendamos mirar el reloj y ajustar la alarma.

DEFENSA Y MÁS DEFENSA

My Tower, My Home nos introduce de lleno en un personaje, representado como una sombra blanca. Éste tiene que defender el núcleo de energía que se encuentra en la parte superior de la torre.

Para poder defender esta torre de los enemigos terrestres, cuenta con escalones para ir saltando, subiendo y bajando. Nos encontramos también con una especie de ascensor que sube y baja sin parar.

Cada nivel que avancemos obliga a reforzar cada vez más la torre para estar más seguros. Aunque no es la única a tener en cuenta. El jugador debe tener cuidado de no perder vida. Lo ideal para conseguir una buena puntuación y monedas en los niveles es encadenar combos, pero no es tan sencillo.

Una vez que acaba un nivel, se nos otorgan una puntuación y monedas, que también pueden recogerse en pequeñas cantidades al derrotar a algunos enemigos. Si conseguimos encadenar varias muertes enemigas, recibiremos del cielo una caja con munición especial, con armas nuevas y limitadas.

Con solo dos clicks, tenemos a nuestra disposición todo el arsenal, algo que nos puede salvar de algún que otro apuro al ser tan rápido y directo.

MEJORAS NECESARIAS

De forma corriente, es posible mejorar tanto al propio personaje y a su nivel, como a la torre. Antes de elegir una estrategia firme y afrontar el juego, es recomendable disputar unas cuantas partidas y tantear qué decisiones son las mejores.

Una vez pensado, ya podremos asignar mejor al personaje los puntos que obtenemos al subir de nivel. Existen tres posibilidades para mejorar al protagonista: Económica, Héroe o La Torre.

La primera aumenta las recompensas al finalizar los niveles y da acceso a cada vez un abanico más grande de armas. La segunda incrementa la potencia en todos los aspectos (recuperación de vida, mejor cadencia de disparo o disparos especiales). Además, ofrece una mejora a la hora de acumular experiencia.

La Torre, la tercera de ellas, aumenta la recuperación de vida del núcleo de la torre y el daño que hacen sus defensas. Respecto a las mejoras en defensas de la torre aparece un buen número de posibilidades, entre las que se encuentran un lanzamisiles, un robot francotirador, minas o incluso muros para poder subir a ellos y y contar con un mejor punto de vista mejor para destruir a los enemigos.

My Tower, My Home permite jugar en modo cooperativo local. El segundo jugador se hace cargo de un dron que apoya al primero.

CONCLUSIONES DE MY TOWER, MY HOME

El aspecto que más destaca de My Tower, My Home es su alto valor adictivo, potenciado por los niveles.

Cuando parece que estamos en un nivel más avanzado y creemos incluso que vamos sobrados, no llegamos al siguiente. Nuestra estrategia no vale, por lo que encontrar la perfecta ante cada situación nos lleva a intentarlo una y otra vez.

El fácil aprendizaje en cuanto a controles y la sencillez en todos los aspectos del juego es otro punto a su favor. La personalización que aparece al elegir las defensas de la torre y también las facultades a mejorar contribuyen a que cada jugador otorgue su toque especial a la partida.

Su económico precio también es algo a favor, puesto que la relación calidad/precio es fantástica. Por contra, la falta de diferentes escenarios, o que el escenario en sí vaya cambiando es algo que se echa en falta.