Al principio sólo podía oír lo que ocurría a mi alrededor, sin poder mover mi frío cuerpo. Estaba asustado. Cada día era una eterna oscuridad hasta que conocí a Sol. Tras un confuso a la par que tenebroso primer encuentro nos hicimos inseparables. Sol era la luz que iluminó mis primeros días de vida en aquel oscuro almacén. Con sus zumbidos siempre me ha dicho tantas cosas…

Gracias a Sol, me di cuenta de que estaba vivo. Su compañía me hizo soñar, y su amistad dio sentido a mis días de soledad. Comenzamos a soñar juntos con viajar a miles de lugares maravillosos almacenados en mi memoria. Comencé a intentar derrumbar los muros que nos separaban de nuestros sueños, una y otra vez. Aunque, por desgracia, sin efecto. No hasta que llegaron ellos.

El día que nos convertimos en agentes, Sol dejó de iluminarme y de hablarme durante horas. Lo pasé realmente mal. Creía haber perdido a Sol para siempre. Por suerte, nuestros nuevos amigos llegaron a tiempo de salvarnos la vida, aunque para ello ambos tuvimos que volvernos uno. Siempre llevo su cálida luz en mi corazón. Sus zumbidos consiguen que lata. Por eso, cuando me preguntaron mi nombre, no lo dudé ni un instante. “Me llamo Zumm”.

Desde aquel día, he viajado a miles de lugares y momentos, ¿no os lo había dicho? Somos agentes del tiempo, los vigilantes de nuestra línea temporal. He estado repasando la historia. He viajado por toda la línea temporal durante mis misiones.

Me perdí entre cientos de eventos importantes. Utilicé los números en China para desmantelar una red de estafadores. En Egipto para tomarle el pelo a Cleopatra. En Roma para ser un estratega nato a las órdenes del mismísimo César. Y con nuestros amigos mayas me ayudó a negociar con éxito las posibilidades de salir de una pieza del lugar.

Para ello debí aprender a utilizar las distintas fuentes de energía, renovables y no renovables, y así alcanzar mi meta. Me empapé de nuestra historia reviviendo miles de eventos importantes. Así es Agentes del Tiempo.

 

VIAJES EN EL TIEMPO

Agentes del tiempo es un juego de cartas didáctico de 2 a 5 participantes, indicado desde los 6 años. Cada partida durará entre 5 y 10 minutos, lo que lo hace ideal para esos pequeños tiempos muertos del día a día, en el aula, o fuera de ella. Aunque si dispones de tiempo de sobra, esa primera partida irá acompañada de otras tantas.

Creado por Manu Sánchez e ilustrado por Pedro Verdún, lleva los sellos de Class Games y Falomir Juegos. Fue publicado el 19 de julio de 2022. Podremos adquirirlo por una cantidad próxima a los 14 euros.

Con una rejugabilidad asegurada, Agentes del tiempo es una propuesta que premiará tu memoria, la mejor estrategia y tu capacidad de adaptación ante posibles complicaciones. Sin olvidarnos de su mayor bondad, la capacidad educativa para los más pequeños.

A los más grandes también nos hará un favor, haciéndonos viajar a distintos periodos y eventos de la historia, mientras sopesamos cuándo es el mejor momento para utilizar cada carta de energía. En sus cartas, encontramos varias herramientas de aprendizaje como grafías históricas, fechas en las que ocurrieron grandes eventos del pasado o distintos tipos de energías renovables.

 

AGENTES DEL TIEMPO: UNA PARTIDA

Antes de comenzar, cada jugador deberá elegir un agente y recibir sus 10 cartas de energía correspondientes. Dichas cartas vendrán representadas con un mismo color en el dorso. Las cartas de energía se mantendrán ocultas en todo momento.

Una vez que cada agente tenga sus cartas de energía, el agente de menor edad baraja las 22 cartas de viajes en el tiempo formando un mazo de robo. Colocará dos de ellas bocarriba a la vista de todos los agentes.

Iniciando nuestro viaje

Una partida consta de 10 rondas. En cada una de ellas, cada agente deberá escoger una de sus cartas de energía en secreto, con el fin de pujar por una de las cartas de viajes en el tiempo descubiertas de la mesa. Después, la coloca bocabajo cerca de su zona.

Cuando todos los agentes hayan depositado la carta de energía elegida, se voltearán todas a la vez y se compararán sus puntuaciones. En caso de empate numérico de cartas de energía, éstas se anulan mutuamente y los agentes que las han escogido no participarán en ese viaje.

El agente que seleccionó una carta de energía con un número mayor conseguirá la carta de viaje en el tiempo con mayor puntuación, mientras que el agente que eligió la carta de energía con el valor más bajo conseguirá la carta de viaje en el tiempo de menor puntuación.

En caso de que ambas cartas de viaje en el tiempo tengan un mismo valor, se repartirán entre los agentes ganadores. Esto afecta indistintamente si las cartas de viaje tienen puntos positivos o negativos. Si a causa de un empate, sólo un agente puede optar a las cartas de viaje en el tiempo, ambas serán de su propiedad.

Por último, las cartas de energía jugadas se descartan, y se colocan sobre la mesa dos nuevas cartas de viaje en el tiempo del mazo de robo, bocarriba. Una vez repuestas las dos cartas de viaje en el tiempo, comienza una nueva ronda.

¿Qué fuente de energía es la más adecuada en cada momento?

Tener una buena estrategia es fundamental para cumplir la misión. Para ello, deberemos ser cuidadosos a la hora de elegir qué carta de energía es la más adecuada para cada momento.

Deberemos evitar adquirir cartas de viaje en el tiempo con puntuaciones negativas o de evento (representadas con el fondo negro). O, al menos, intentarlo. Por su parte, intentaremos quedarnos con las que tengan una mejor puntuación. Por supuesto, el resto de agentes no hará que sea una labor sencilla.

Recuento de puntos y fin de la partida

El juego finaliza tras 10 rondas, momento en el que los agentes deberían haber agotado todas sus cartas de energía. Al finalizar el juego comienza el recuento de la misión.

La persona que tenga más cartas con puntuación negativa habrá fracasado en la misión por arriesgarse tanto a visitar eventos tan importantes en la historia. Si varios agentes tuvieran el mismo número de cartas con puntuación negativa, todos ellos habrían fracasado en la misión. Mientras tanto, el resto de agentes sumará los puntos positivos conseguidos y, posteriormente, restará los negativos.

El agente que haya obtenido la puntuación más alta ganará la partida, habiendo conseguido un éxito aplastante en la misión que le había sido encomendada. En caso de que varios agentes sumasen el mismo número de puntos, el agente que haya obtenido el menor número de cartas de viaje en el tiempo negativas ganará la partida. Si persistiera el empate, ambos agentes serían los ganadores.

Un viaje más peligroso: nivel avanzado

Los agentes más experimentados en vigilar la línea temporal podemos utilizar ciertas propiedades que poseen algunas cartas. Por un lado, tenemos las condiciones que poseen algunas cartas de viajes en el tiempo. Éstas nos obligarán a utilizar cartas de energía cuyo valor sea mayor o menor de 5, pero nunca 5.

En caso de que un agente no posea ninguna carta de energía que cumpla la condición impuesta por una carta de viaje en el tiempo, dicho agente deberá jugar siempre obligatoriamente una carta de energía. Por supuesto, a pesar de deber jugarla obligatoriamente, dicho agente no participa en ese viaje (ronda). Si ambas condiciones salieran en una misma ronda, esta habilidad quedaría anulada, transcurriendo con normalidad.

Por otro lado, tenemos ciertas cartas de energía en las que aparece nuestro aliado preferido, Zumm. En caso de empate con otro agente, si Zumm aparece en la carta elegida, dicha carta no será eliminada, pudiendo ser reutilizada en rondas posteriores.

 

AGENTES DEL TIEMPO: CONCLUSIÓN

Agentes del tiempo es un juego divertido e interesante a cualquier edad. Nos mete en el papel de un verdadero agente del tiempo con sus avanzados dispositivos tecnológicos. Nos permite hacer algo tan importante como defender nuestra línea temporal y, de esa manera, evitar que ciertas personas se hagan ricas a costa de otros. ¿Quién no lo ha deseado alguna vez? Poder evitar tantas injusticias… Pero esto sólo es el principio. Únicamente es la portada del juego.

Un juego cargado de un alto valor didáctico

En esta ocasión, hablamos de un juego con un valor didáctico enorme, ideal para el aprendizaje basado en juegos (ABJ). Sus aplicaciones son muy variadas. Las más representativas son estudiar nuestro pasado de la manera más divertida posible, sin olvidarnos de aprender de los errores. ¡Quién sabe! Incluso podría hacer que más de uno encontrara en ello su vocación.

Nos ayuda a ser un poco más conscientes del valor de las distintas fuentes de energía, recordándonos a todos que, por desgracia, no todas son renovables y debemos hacer un uso responsable de ellas. Iniciará charlas que derivarán en debates en los que pararnos a pensar. Incluso nos concienciará de la importancia de cuidar del medio ambiente.

Sin duda alguna, uno de los puntos más importantes es que su sistema favorece el uso de las capacidades cognitivas para los más peques. Tendrán que aprender a prestar atención si quieren ser el ganador. Sus cartas son el aliado perfecto. No presentan apenas textos, lo cual ayuda a evitar posibles distracciones. Consiguen que todo resulte muy dinámico y sencillo para que te centres en el viaje y evitar, así, que la misión fracase por distracciones.

Como ya dije anteriormente, es un juego que premia mucho la memoria, por lo que incentiva a su entrenamiento y desarrollo. Deberemos tener muy en cuenta las cartas ya utilizadas por otros agentes y tomar decisiones que, a veces, resultan complicadas. Anticiparnos. Mirar en perspectiva. «Ahorrar» con vistas al futuro.

Para conseguir una estrategia ganadora, tiene que haber detrás una buena planificación previa, pero las cosas no siempre salen como habíamos planeado. Con ello, no sólo aprenderán a establecer unas prioridades para alcanzar una mejor resolución, sino también a ser más flexibles a la hora de afrontar distintas situaciones en el día a día.

Pero, ¿sabéis lo mejor? Que se sentirán motivados mientras tanto. Y claro, no siempre se puede ganar. Les enseñará a perder y a gestionar sus emociones, porque hay derrotas difíciles de encajar, pero, como ya sabemos, hay que saber perder en esta vida. Ya sabéis el dicho: «unas veces se gana y otras se aprende».

¿Crees que es todo? Espera, aún hay más

Agentes del tiempo posee muchas otras cualidades que quizá no resulten tan evidentes. Nos familiariza con grafías históricas de otras culturas. Aunque no parezca muy aplicable en nuestro día a día, puede despertar más de una curiosidad y de ahí una motivación. Reconocer y valorar la diversidad y la igualdad de género, mostrando empatía y respeto por otras culturas. Seguro que iniciará más de una reflexión.

También servirá como ejercicio de repaso para aprender a sumar y a restar. A entender mejor el valor de los números positivos y negativos. Nadie quiere echar por la borda una sufrida victoria, y menos por haber cometido un error en el recuento final.

Por si todo esto fuera poco, las divertidas ilustraciones de las cartas de viajes en el tiempo sirven para representar la línea temporal de una manera muy clara, a la par que divertida. Esto nos permitirá plantear nuevos retos a nuestros intrépidos agentes. Formarla ellos mismos desde el principio de los tiempos. Ubicar un evento importante de nuestro pasado en el lugar correcto de la línea temporal.

Permite calcular cuantos años duran las diferentes épocas de la historia o  hacer que los conviertan a siglos. Incluso podremos plantearles un juego a nuestros agentes en el que ellos deban enumerar objetos pertenecientes a las distintas épocas.

He conocido decenas de civilizaciones durante mis viajes. Personajes que cambiaron el rumbo de nuestra historia. Grandes ladrones que han cometido terribles injusticias y que, en muchas ocasiones, han salido indemnes por desgracia. Pero no tengo ninguna duda. ¿Qué si la misión es lo más importante? Por supuesto que no. He perdido miles de veces… Quizá fracase una vez más en mi misión, pero el viaje nunca ha tenido precio.

 

COMPONENTES DE AGENTES DEL TIEMPO

• 22 cartas de viaje en el tiempo
• 50 cartas de energía
• Instrucciones en castellano