THE OLDest ART, el arte paleolítico en un juego de cartas

THE OLDest ART

THE OLDest ART será una realidad en el mes de noviembre, con el sello de oqubo. Este juego de cartas, creado por una comunicadora y un informático, gira en torno al arte paleolítico. Actualmente, está inmerso en una campaña de búsqueda de financiación en Verkami con su objetivo inicial ya superado.

 

¿CÓMO SE JUEGA A THE OLDEST ART?

THE OLDest ART tiene 50 días por delante en Verkami. Mientras dure la campaña, puede obtenerse por 14 euros. La recompensa incluye el juego y los gastos de envío a España.

Se presenta como un juego de cartas de 2 a 4 participantes, indicado desde los 6 años y repleto de misteriosos símbolos, bestias salvajes y giros. Toma como referencia el arte paleolítico, convirtiéndose en un reto didáctico que no precisa de conocimientos previos.

Recurre a las ilustraciones reales creadas en el norte del país hace miles de años. Concretamente, plasma una selección de 46 imágenes. A través de unas reglas sencillas, y de la estrategia, la misión es quedarnos sin cartas antes que los rivales.

THE OLDest ART Verkami

Debemos saber que cada carta es una obra. Aparece el nombre de la cueva en la que se ubica, su temática (familia) y su técnica de realización (color). Se completan con seis cartas de acción.

El primer paso es repartir seis cartas por persona. Las restantes conformarán el mazo. Descubrimos la primera, iniciando la pila de descartes. El turno consiste en descartar una carta de la mano, cumpliendo con los requisitos.

Descartaremos una carta de la misma familia o color que la última visible o una que coincida en ambos. Con esta segunda opción, podemos descartar otra carta. Si no existe coincidencia, robamos una del mazo antes de pasar el turno.

En lo que respecta a las cartas de acción, podrán jugarse sobre cartas del mismo color. Nos servirán para obligar a alguien a perder su turno o a robar dos cartas del mazo. Funcionan, además, para descartar todas las cartas de un color o para efectuar intercambios. Vencerá el primero en quedarse sin cartas.

Cuando acabemos la partida sabremos identificar las figuras representadas y conocer algunas de las técnicas utilizadas, tal y como prometen sus creadores. Puesto que estamos ante una baraja de familias y colores, es apta para inventar variantes.