Por el momento, no hay detalles sobre su fecha de lanzamiento, pero Kelp avanza a buen ritmo. Tras una exitosa campaña en Kickstarter, en la que atrajo a más de 20.000 mecenas, el nuevo juego de Wonderbow Games tendrá su edición en castellano de la mano de Delirium Games.

Y es que Delirium no pierde el tiempo. La editorial, que acaba de estrenar Let’s Go! To Japan, tiene en fase de fabricación diferentes títulos, como es el caso de Keep The Heroes Out!

Volviendo a Kelp, estamos ante uno de esos juegos que no podrá faltar en las estanterías de los amantes de los retos en pareja. Nos ofrecerá competiciones asimétricas que no superarán la hora de duración. Sus aguas serán el escenario perfecto para una batalla por la supervivencia entre dos terribles depredadores del fondo marino: el pulpo y el tiburón.

A pesar de que contará con mecánicas distintas en ambos bandos, sus responsables aseguran que no será un juego complicado, marcando su edad de inicio recomendada en los 10 años.

Su desarrollador, Carl Robinson, ha querido que realmente nos metamos en la piel de ambas criaturas marinas, plasmando en el juego varios de sus hábitos de caza y costumbres. Contará con Weberson Santiago como ilustrador, dejándonos un apartado artístico que promete satisfacer a los más exigentes. La inmersión instantánea parece garantizada.

¿QUÉ TESOROS ESCONDEN LAS PROFUNDIDADES DE KELP?

Viéndonos envueltos en su salvajes parajes marinos, la partida será muy distinta si optamos por ser el esquivo pulpo o el insaciable tiburón gato.

 

Una partida a Kelp como pulpo

Jugaremos al escondite arriesgando nuestra vida, con dos acciones por turno. Por suerte, al igual que los verdaderos pulpos, seremos unos artistas en ello.

Lo haremos mediante el uso de cartas y movimiento de bloques que permanecerán ocultos para el tiburón. En uno de esos bloques estaremos escondidos. Por suerte, contaremos con diversas opciones de movimiento de bloques, que harán que dar con nuestro paradero no sea tarea fácil.

Una de ellas nos permitirá intercambiar dos bloques a nuestra elección. La otra nos servirá para reposicionar todos los bloques, barajándolos y dejando todo en manos del azar. Todo esto mientras el acoso por parte del tiburón no cesa ni por un instante.

Las cartas no sólo nos servirán para movernos ni los bloques para escondernos. Contarán con distintos efectos con los que mejorar nuestras habilidades de supervivencia, reducir el coste de nuestras cartas o adquirir habilidades especiales, entre otros. Siempre podremos optar por descartar una carta para volver a esconder uno de nuestros bloques descubiertos…

Nada es gratis. Si queremos activar el efecto de sus cartas, deberemos pagar su precio. De esta manera, deberemos ser muy cautelosos a la hora de decidir si es la mejor opción para dicha situación. Y no es para menos, nuestra vida está en juego.

Tendremos dos formas de ganar la partida. La primera será burlar al tiburón hasta que ponga su último dado en su medidor de hambre.

La segunda pasa por ser capaz de comernos toda la comida sin morir en el intento. No resultará sencillo, puesto que cada vez que lo hagamos descubriremos nuestra posición, lo cual podría traernos unas catastróficas consecuencias.

Una partida a Kelp como tiburón

En este bando nos centraremos en movernos continuamente en busca de nuestro escurridizo amigo. Darle un respiro podría dejarnos sin banquete y no lo podemos permitir. Habrá que hacerse más fuerte y astuto turno a turno.

Lo haremos haciendo uso de los dados, de la construcción de bolsas, ganando cartas y desbloqueando nuevas habilidades especiales. Para ganar la partida deberemos cazar al pulpo antes de colocar el último dado en el medidor de hambre.

Los turnos constarán cuatro de fases. Primero, tiraremos dados. Luego nos moveremos un espacio por turno dentro de las corrientes creadas por sus dados azules, siempre hacia adelante. Encontramos una fase de búsqueda o ataque. Finalizaremos con la fase de crecimiento.

En la fase de búsqueda, los dados amarillos serán los protagonistas. Si no cumplimos con los requisitos de zona no desvelaremos el bloque que estamos investigando. Si encontramos al pulpo, esperaremos al turno siguiente para atacar usando un dado rojo de nuestra bolsa.

También tendremos la opción de atacar un bloque sin previamente haberlo desvelado. No obstante, hacerlo supondrá un riesgo, como veremos a continuación.

En la fase de ataque, los dados rojos decidirán si nuestras acometidas dan en el blanco. Siempre que usemos un dado rojo irá a parar a nuestro medidor de hambre. Pensaremos fríamente que nos conviene en cada momento.

Por si esto fuera poco, podremos acumular dados en nuestra reserva de energía para comprar cartas que nos den ventajas. Cada vez que usemos nuestra energía, dejaremos un dado de los utilizados en el medidor de hambre. El resto regresará a nuestra bolsa.

En la fase de crecimiento, nos fijaremos en las fichas de habilidad con requisitos de dados. Cuando cumplamos el requisito de una de ellas, conseguiremos su habilidad durante el resto de la partida.

Preparen sus palomitas, ¡el combate va a dar comienzo!

Cuando el tiburón sea capaz de encontrar y atacar con éxito al pulpo, aún no estará todo acabado para nuestro amigo cefalópodo. Entraremos en una fase de confrontación. Tanto el pulpo como el tiburón tendrán tres cartas de confrontación. Cada jugador elegirá una carta y la jugará bocabajo frente al otro.

Acto seguido, ambas serán desveladas. Si los colores coinciden, el tiburón atrapa al pulpo y la partida finaliza. En cambio, si son de diferente color, el pulpo escapa una vez más de las fauces del feroz depredador. Si esto ocurre, se descartarán las cartas y el juego seguirá.

A causa de esto, la siguiente vez que el tiburón acorrale al pulpo y le obligue a ir a fase de confrontación ambos tendrán solo dos cartas. Si el pulpo volviera a escapar, a la tercera el pulpo no tendría escapatoria.