A la Navidad todavía le queda mucho por delante, lo que significa que aún quedan reuniones familiares y de amigos por disfrutar. Si echamos la vista atrás (muy atrás), la Nochevieja consistía en sacar del cajón nuestros mejores juguetes de acción para prestárselos a los primos.

No hace ya tanto (o quizás eso es lo que nos gusta creer), ya empezábamos a cenar con el móvil en mano. Eso sí, sólo lo necesitábamos para dar unos cuantos toques y para establecer el punto de encuentro tras tomar las uvas. La realidad, ahora, es totalmente distinta. El móvil se ha convertido en una parte más del cuerpo.

WhatsApp por aquí. WhatsApp por allá. Que si consulto esa duda que surge durante la cena para que el señor Google la resuelva. Y esa otra. Más WhatsApp. Oye, mira este vídeo que me han pasado. ¿Y viste ese de los perritos? ¡Ya sólo queda media hora para las campanadas! ¿Dónde he puesto la tablet? Para un año que hay con buenos presentadores, no podemos perdérnoslas por nada del mundo.

Parece que a la tablet no le queda batería. Al menos, la consola ya se enciende. ¡No me digas que los mandos no están cargados! Estrés. No me agobies, Manolo, que ya he oído que tu móvil se ha apagado. Dame un segundo. ¿De verdad el 2025 va a empezar así? ¿Y la cena previa a los Reyes Magos va a ser más de lo mismo? Quédate con esto: cargadores GaN. Te contamos porqué van a salvarte la vida.

¿QUÉ SON LOS CARGADORES GaN?

Lo primero que debes saber de tus nuevos compañeros de vida es que estamos ante cargadores de nitruro de galio (GaN), de ahí su nombre. Vale, primera lección aprendida. Ha sido fácil, ¿verdad?

Considerados una revolución en la carga rápida, llegan para quedarse. Ya hemos visto que necesitamos dispositivos para el tiempo de ocio. Para el trabajo. Para las esperas del bus. Pueden apagarse en el momento más inoportuno, dejándonos, literalmente, tirados.

Al igual que inviertes tiempo buscando los mejores móviles, tablets, consolas y accesorios, es justo que también le dediques interés a los cargadores. Al fin y al cabo, son la base para que todo funcione. No sirve con el primero que pilles. Podría dañar el dispositivo. Calentarlo demasiado. No cargar lo suficientemente rápido. Con ello, los cargadores GaN son una buena opción a valorar por distintos motivos.

Innovación y cuidado del planeta

Cada vez es más popular el uso del GaN en la tecnología. Los fabricantes aprovechan su alta eficiencia para ofrecer productos que evolucionan, como también lo hacen nuestras necesidades. El silicio era clave para los cargadores, pero está siendo sustituido por este material que conduce mejor la electricidad.

Como punto destacado, el GaN da forma a cargadores más pequeños y ligeros de lo habitual, capaces de reducir las pérdidas de energía. Por tanto, se potencian la sostenibilidad y el ahorro energético. Estarás disminuyendo la huella de carbono al reducir el consumo de energía. Es decir, necesitarás menos electricidad para cargar tus dispositivos.

La carga rápida

Cuidar el planeta está genial, pero ahorrar tiempo también. Los cargadores GaN están diseñados para una carga rápida y eficiente a partes iguales. Ya hemos visto como tienen un tamaño más pequeño que los habituales. A pesar de ello, cuentan con una potencia mayor.

Así, cargaremos móviles, tablets, consolas, relojes y mandos de una manera más rápida y con menos calor generado. En cuestión de minutos, nos sacan de un apuro. En el tiempo que tardamos en ponernos las zapatillas y el abrigo, y en peinarnos un poco, el móvil estará preparado para aguantar un par de horas más.

La alta compatibilidad

Es importante remarcar la elevada compatibilidad que ofrecen con los distintos dispositivos móviles. Podremos usarlos para cargar tablets, mandos, auriculares inalámbricos, relojes inteligentes… Es una ventaja a la hora de ahorrar espacio en casa y, sobre todo, en la maleta.

Como tardan muy poco en cargarse, basta con echar uno en la mochila para alimentar todos nuestros chismes. Ya no será necesario llenarla de cables. Cargaremos cada dispositivo en minutos antes de pasar al siguiente. Además, algunos de ellos permiten la carga de varios de forma simultánea, agilizando, aún más, el proceso.