Goat Simulator: The Card Game empieza campaña en Kickstarter

Goat Simulator The Card Game

Goat Simulator: The Card Game, presentado a principios de año, ya cuenta con campaña de búsqueda de financiación en Kickstarter. El juego de cartas oficial del exitoso videojuego Goat Simulator (ése que nos convierte en cabra) ya ha superado su meta inicial. Llegará en febrero de 2026.

 

ASÍ ES GOAT SIMULATOR: THE CARD GAME

Goat Simulator: The Card Game es un caótico juego de cartas caprino de 2 a 6 participantes con peluche de por medio. Surge fruto de una colaboración entre Coffee Stain, responsables del videojuego, y la editorial de juegos de mesa MOOD Publishing.

Su precio durante la campaña es de 20 euros. Por 30 euros, podemos hacernos con su edición especial, presentada en formato lata, con la cabeza de la cabra. Incrementando esta cantidad, sumamos extras como un tapete, más cartas o un peluche más grande. Debemos tener en cuenta que el juego está en inglés y que no incluye los gastos de envío.

El objetivo es trasladar a la mesa todas las locuras que vivimos en la saga de videojuegos. Equiparemos a las cabras para completar misiones, sabotearemos a los rivales y desataremos el caos con las cartas de karma. Es un reto competitivo. El primero en alcanzar los 10 puntos de caos reclama la victoria.

El turno consiste en robar una carta y en llevar a cabo dos acciones. Necesitaremos reunir cabras. Al añadir una cabra a nuestra zona, lanzamos el peluche por los aires. Si cae sentado, obtenemos una acción extra.

Cada cabra tiene espacio para tres equipamientos: cabeza, torso y pezuñas. Cada equipamiento que le añadamos se traduce en un punto. Además, otorga un efecto. Saltaremos turnos de los oponentes o robaremos.

Por su parte, las cartas de karma se traducen en efectos más potentes, como el descarte de todas las cartas de la mano. Al completar nuestra misión (cuando vistamos a una cabra con los colores señalados) también recibimos puntos.

El humor, por descontado, forma parte de la experiencia. Se completa con una variante infantil. Comparte el mismo nivel de caos, aunque las mecánicas son más simples.