Hoenn. La historia se repite. El agua contra la tierra, la tierra contra el agua. Pero ahora el 3D es protagonista, al igual que las nuevas fuerzas mediante las mega evoluciones. De nada sirve esconderse en las bases secretas porque, tarde o temprano, solo prevalecerá una. Así son Pokémon Rubí Omega y Pokémon Zafiro Alfa.
NOSTALGIA Y REVOLUCIÓN GRÁFICA
El pasado 28 de noviembre vio la luz la pareja de remakes Pokémon Rubí Omega y Pokémon Zafiro Alfa en Nintendo 3DS. Ambos juegos pretenden profundizar más aún en la historia que conocimos de la mano de Game Boy Advance, allá por el año 2003, con Pokémon Rubí y Pokémon Zafiro.
Ahora que está a la venta, llega la gran pregunta: ¿existe algún cambio respecto a los juegos originales? Pues sí y bastantes. Empezando por los gráficos, Pokémon X e Y apostaron, el pasado año, por una revolución gráfica total, pasando de unos escenarios en 2D a 3D muy logrados, que han conseguido la bendición de la mayoría de los aficionalos.
La cosa no se quedo ahí. Los combates pasaron a ser más emocionantes e intensos, las animaciones de las criaturas y de sus ataques fueron cambiadas y se les aplicó el efecto 3D. Con la llegada de estas mejoras, apareció una nueva forma de evolucionar más propia de juegos de la competencia: la mega evolución, que consistía en equipar a un Pokémon con una determinada piedra para que su forma y su poder cambiasen durante el combate.
Pues bien, estos dos nuevos remakes comparten todas y cada una de estas novedades (a las que se suman las regresiones primigenias en Groudon y Kyogre), algo que sorprenderá mucho a los que no probaron Pokémon X e Y y que seguro volverá a alegrar a los que se impresionaron con sus novedades (aunque probablemente no experimenten esa sensación de sorpresa e ilusión). Con ello, estos dos nuevos títulos podrían resumirse como la historia de Pokémon Rubí y Zafiro bajo el estilo Pokémon X y Pokémon Y.
UNA CUANTAS NOVEDADES…
La historia de ambos títulos es la misma que la que ya conocíamos, aunque existen varios detalles importantes que encantarán a quienes disfrutaron de la aventura original. Más allá de las novedades en gráficos y de las mega evoluciones (que sirven para compensar el hecho de que no existan Pokémon nuevos), hay varios aspectos que merece la pena tener en cuenta.
La opción de andar de forma muy lenta para conseguir determinados Pokémon, la posibilidad de luchar con Pikachu disfrazado, las nuevas posibilidades de la Pokédex o Ultra Vuelo son algunas de las nuevas características más destacadas. Este último es un pequeño paso que ofrece una visión diferente como es montar en Mega Latias o Mega Latios y surcar el cielo. Esta nueva experiencia permite disfrutar de lugares secretos y de unas impresionantes vistas desde las alturas.
¿Y qué hay de las más que anunciadas bases secretas? No son del todo una novedad, pero puede decirse que en algo sí que innovan. Ahora son más acogedoras, sus objetos son más nítidos, detallistas y bonitos y, además, sirven como lugar para interactuar con otras personas e incluso para crear un gimnasio propio o construir una Mansión Pokémon.
Los concursos, que fueron uno de los destacados de las versiones originales, por el contrario, no impresionan demasiado. Siguen manteniendo la misma esencia, se vuelven lentos y pierden dinamismo y dificultad. Resulta más espectacular ver como Dragonite ejecuta un Hiper Rayo con el fondo del salón de casa, pero a cambio se pierde la graciosa cara del juez. Por su parte, también se ha eliminado la personalización del entrenador mediante las tiendas de ropa respecto a Pokémon X y Pokémon Y.
POKÉNAV, ¿LA ESTRELLA?
El PokéNav es un artilugio merecedor de un apartado para él solo, ya que ofrece bastantes posibilidades (aunque unas mejores que otras). La aplicación CartoNav permite tener el mapa de Hoenn siempre a mano en la pantalla inferior de la consola y, pulsando sobre él, aparece un mapa completo con diferentes filtros para aplicar que nos avisarán de qué entrenadores quieren una revancha, de dónde hemos plantado bayas o en qué lugar están construidas las bases secretas.
Por otro lado, el VideoNav permite obtener información de lo que pasa en la región, ya sean ofertas en tiendas, noticias sobre amigos a través de StreetPass o algunas anécdotas interesantes (muchas de ellas protagonizadas por el jugador). A su vez, el DiverNav incluye el PSS, el Poké Recreo y los Superentrenamientos ya vistos e introducidos en Pokémon X e Y, ofreciendo algunos minijuegos sencillos para pasar el rato, que bien podrían haberse cambiado un poco respecto a los últimos juegos.
Por último, si hay algo que destaca por encima de todo lo demás es el llamado DexNav, también dentro del PokéNav. Se trata de una novedad que se recibe desde los primeros minutos de juego, permitiendo que no se escape ni un solo Pokémon de ninguna ruta. ¿Aparecerá en la cueva algún Pokémon además de Zubat? ¿Taillow y Zigzagoon son los únicos que aparecen en la hierba? Para evitar perder el tiempo buscando algo que no hay (así como para avisar de sorpresas inesperadas), DexNav nos dirá qué Pokémon aparecen en cada zona.
Y eso no es todo, ya que nos informará, mediante sombras y símbolos, de las criaturas especiales que ya tenemos en nuestro equipo. A lo largo de la aventura aparecerán Pokémon perfectamente visibles con ataques especiales a los que solo es posible acercarse caminando muy despacio. Pues bien, el DexNav nos dirá cuáles tenemos e incluso informará de los que están en niveles altísimos. De esta forma, será mucho más fácil valorar si merece la pena introducirse o no en la hierba.
CONCLUSIONES
Tras jugar a Pokémon Rubí Omega y Pokémon Zafiro Alfa se pueden obtener varias conclusiones. Los seguidores de la saga Pokémon desde el principio de los tiempos tienen que jugar sí o sí a estos nuevos juegos. Con ellos, podrán revivir todos y cada uno de los lugares que aparecieron en los originales y volver a hablar con sus personajes. Su revolucionaria estética y sus novedades se complementan a la perfección.
Sin embargo, probablemente las novedades no sean tantas como para convertirlo en un juego perfecto y el hecho de que ya viésemos esa estética en Pokémon X y Pokémon Y implica que la sensación de asombro no sea ya muy común entre los jugadores.
Por otro lado, los jugadores anti-remakes más vale que se alejen de estos nuevos títulos y es que, aunque han aprovechado muy bien el paso del tiempo, no son sino dos juegos ya jugados y requetejugados. Eso sí, su duración es larga (sobre todo con su episodio especial después de los créditos) y sus posibilidades de juego continúan siendo casi infinitas, con secretos que merece la pena descubrir.