Un escenario ambientado en el universo de la piratería no se limita a surcar los mares en busca de riqueza. Ni a beber ron. La figura de un pirata no se entendería sin estos dos elementos, pero incluye muchos otros necesarios para la gloria y para la misma supervivencia. Así lo demuestra Pirates: Tides of Fortune, un MMO con la estrategia como principal aliada.

El jugador tiene la tarea de crear una impresionante guarida, con edificios como aserraderos o bodegas que permitan un abastecimiento constante de recursos. Desde ella, se podrá apostar por los descubrimientos, ya sea hacia el comercio o hacia una mejora de las armas, y optar por una estrategia para enfrentarse a la Flota Española. Formar parte de una Hermandad será el primer paso para ser el pirata del que todos se sientan orgullosos.

 

LAS RECOMPENSAS A UN DURO TRABAJO

Pirates: Tides of Fortune es una creación de Plarium, que ya cuenta con un amplio catálogo de juegos para navegadores y móviles. Entre ellos, encontramos Sparta: War of Empires, Stormfall: Age of War o Vikings: War of Clans. Bajo el concepto free to play con micropagos, ofrece una experiencia que poco o nada tiene que envidiar a otros juegos de estrategia.

Como tal, cuenta con misiones diarias y suculentas recompensas. Permite apostar por una eficaz construcción en forma de bodegas, naves, serrerías, cañones, talleres de alquimista, gremios, cementerios encantados, enfermerías, fábricas de vapor, muros y hasta pozos de tiburones. Cada una tiene su función en forma de nuevos recursos o de una defensa eficaz. Estos mismos recursos serán la herramienta para mejorar las edificaciones y para contratar refuerzos y tripulación.

Los descubrimientos son otro punto clave a la hora de prosperar. Investigar en el comercio, en el vuelo, en la metalurgia o en las matemáticas es tan importante como apostar por armas y munición mejoradas. Las posibilidades son tan grandes que la mejor opción pasa por especializarse. Aunque tampoco es mala idea apostar por un poco de cada.

La libertad a la hora de jugar también se refleja a la hora de realizar asaltos, uno de los mayores atractivos del juego. Aunque antes de iniciarse en la verdadera competición, se recomienda apostar por un eficaz trabajo. Tras él, tendremos una amplia plantilla a la que recurrir, ya sea en forma de flota, mercenarios o piratas. Un ataque con éxito traerá consigo aún más recompensas.

La constante subida de nivel, propia del género, va de la mano de la mejora de la guarida propia. El objetivo final de la aventura es crear un espacio perfecto que pueda ser orgullo de toda la comunidad y que ofrezca los elementos necesarios para acabar con los enemigos. Su defensa es su pilar básico.

 

LA EXPERIENCIA MULTIJUGADOR

El principal atractivo de un juego de estrategia, en la actualidad, es su carácter multijugador. El que es el alma de Pirates: Tides of Fortune se presenta por medio de Hermandades. Cada una cuenta con reglas propias, ya sea entrar un determinado número de veces por semana, tener un nivel mínimo o no jugar a Candy Crush Saga.

Todas ellas luchan por situarse en los primeros puestos de una clasificación que se actualiza de forma constante y que es el resultado del duro trabajo de sus miembros. Tras escoger una y enviar la solicitud pertinente, queda esperar. Con suerte, seremos aceptados y formaremos parte de esos planes comunes para dominar los mares.

Aunque en buena parte de los casos el mismo objetivo se centra en evitar ser expulsado de ellas, la misión individual pasa a convertirse en colectiva. Los planes para el beneficio propio forman parte ya de un conjunto. Pertenecer a una Hermandad no sólo aportará dinamismo, emoción a las partidas y un sentido, sino que añadirá una protección reconfortante en forma de consejos.

La interacción con otros participantes llega también con los amigos agregados. Es posible visitar sus guaridas, enviarles refuerzos, intercambiar recursos, escribirles cartas o realizar asaltos y bloqueos, siempre que se cumplan las condiciones de nivel. Las alianzas y las traiciones están a la orden del día y, con gran frecuencia, los pactos pueden dar paso a escenarios en llamas.

 

TRES ELEMENTOS A TENER EN CUENTA

En medio de la estrategia, es necesario tener en cuenta tres aspectos que caracterizan el juego: sus buenos gráficos, su idioma y su sistema de micropagos. Empezando por el primero, puede afirmarse que Pirates: Tides of Fortune cuenta con unos gráficos acordes a su jugabilidad. El colorido propio de una aventura pirata se combina con la importancia del detalle y del realismo.

Su estética se refleja en un menú estructurado y esquemático. Sus enormes posibilidades pueden hacer que los jugadores poco habituales al género se bloqueen en algún momento, pero por lo general, no llega a ocurrir. Cuenta con un tutorial excepcional, a modo de paseo por todas sus opciones. El jugador estará listo para empezar a tomar sus propias decisiones sin apenas darse cuenta.

El orden no tiene todo el mérito a la hora de gestionarlo. El hecho de que se encuentre disponible en castellano también es un punto a su favor. Cada opción incluye una explicación, perfectamente traducida, y cada construcción se ambienta con un texto con su utilidad. La ambientación también llega con sus textos e informes (además de trabajados personajes) y siempre es de agradecer poder comunicarse con los miembros de una Hermandad en el idioma propio.

La tercera característica a tenerse en cuenta es su sistema de micropagos. Un juego gratuito nunca lo es del todo, a menos que esté repleto de publicidad. Y éste no es la excepción. Con frecuencia nos encontraremos ante jugadores con guaridas espectaculares y con una defensa de lujo. ¿Fruto de sus horas de juego casi infinitas o de las compras a través de dinero real?

Los rubíes son el bien más preciado. Son difíciles de conseguir y necesarios para apostar por los elementos más originales y bonitos del juego. Con ello, la tienda es la forma más fácil de obtenerlos y pasan desde los 3.65 euros hasta los 487. Pasar por caja ayuda a la hora de progresar, pero no es algo indispensable para disfrutar del juego ni para lograr ese objetivo. Tal vez cueste más esfuerzo, pero nadie ha dicho que las cosas sean fáciles para un capitán pirata.

Con todo ello, Pirates: Tides of Fortune gustará a los que se inicien en el género y a los expertos, quienes no echarán nada en falta. La correcta gestión de recursos y un buen equilibrio entre ataque y defensa son las claves para el éxito, en mitad de todas las posibilidades que ofrece.

Es satisfactorio ver crecer una guarida que parte de la nada y comprobar como formamos parte de la mejor Hermandad, por lo que está más que recomendado para aquéllos que estén dispuestos a invertir tardes delante de la pantalla, saboreando el orgullo de la gloria en los Siete Mares e ingiriendo las derrotas tras planes mal ejecutados de la tripulación.