1.500 m, el atletismo en forma de juego de tablero

La editorial española Lucky Loser, responsable de Basketball Age, trabaja a fondo en una carrera de atletismo. Lo hace a través de 1.500 m, juego de tablero que podría publicarse a principios de 2018.

 

¿EN QUÉ CONSISTE 1.500 M?

1.500 m es un juego de mesa de 3 a 8 jugadores, con partidas de 40 a 80 minutos de duración. Recomendado para mayores de 10 años, es una creación de Eduardo Crespo.

Tal y como confirma su autor, será durante los primeros meses del próximo año cuando se convierta en una realidad, de la mano de su editorial, Lucky Loser. A la espera de que ese momento llegue, su prototipo está presentándose en distintas jornadas y eventos.

Esta novedad convierte a sus participantes en corredores de una carrera de 1.500 metros lisos, con el objetivo de cruzar la línea de metal antes que sus rivales. La estrategia y la gestión a la hora de controlar la fuerza mental, el ritmo y las acciones extra de los deportistas será clave para alcanzar la victoria.

Una ronda se estructura en dos fases: cartas y ritmo. La primera comienza con una puja donde, en secreto, todos escogen una carta de movimiento y otra de puja. Tras descubrir las de puja, será el jugador con la carta de más valor quien escoja la acción a realizar en primer lugar.

1.500 m juego de mesa

Deberá restar los puntos de fuerza mental invertidos. Por su parte, quien tuviera el valor más bajo, no tendrá derecho a realizar acción. Recuperar puntos de fuerza mental o subir el ritmo son algunas de las posibilidades.

La fase continúa con el movimiento. Se descubren las cartas de movimiento jugadas para hacer avanzar a los corredores respetando el orden. Mientras que las cartas de puja volvían a la mano una vez utilizadas, las de movimiento se dejan sobre la mesa, para recuperarse una vez jugadas las cuatro disponibles.

Respecto a la fase de ritmo, la segunda de la ronda, cada jugador podrá escoger entre mantener su ritmo actual o subirlo o bajarlo un nivel, gastando los puntos necesarios para ello. Esta mecánica se repite hasta que un corredor cruce la línea de meta, tras haber realizado tres vueltas y tres cuartos.

Con ello, la mecánica de control de riesgo también forma parte de la competición. Cada uno podrá avanzar todo lo que considere oportuno, pero atendiendo a los puntos disponibles. Por su parte, 1.500 m recurre a la lógica y a la intuición a la hora de establecer sus reglas.

Esto queda visible, por ejemplo, en la gestión de los cien puntos de fuerza mental. Así, el corredor que vaya en primer lugar pierde puntos por la presión que exige estar en esa posición. La presión aumenta aún más durante la última vuelta.

Además, aparecen los cambios de carril, con su correspondiente gasto adicional de puntos de movimiento. Esta novedad incluirá varias reglas para aumentar la estrategia en las partidas, así como una variante más corta, de 800 metros lisos (dos vueltas).