Coincidiendo con la vuelta a clase y al trabajo, Homoludicus ha lanzado la nueva edición de Matamoscas, el divertido juego de agilidad y rapidez en el que los jugadores competirán por atrapar las moscas que le otorguen la mayor puntuación.
ARGUMENTO DE MATAMOSCAS
Matamoscas es un práctico juego de cartas de 2 a 8 jugadores, aunque recomendable para más de 4 personas y valorado en unos 10 euros. En él, los jugadores deberán hacer uso del matamoscas (sus propias manos) para atrapar a las criaturas voladoras y conseguir la mayor puntuación cuando se terminen las cartas.
Entre estas cartas encontraremos cartas de matamoscas y cartas de mosca. Las moscas se dividen en seis colores diferentes: azul, verde, amarillo, naranja, morado y rojo y, a su vez, poseen diferente puntuación, anotada en sus camisetas.
INSTRUCCIONES DE MATAMOSCAS
Para comenzar, se reparten todas las cartas entre todos los jugadores, permaneciendo boca abajo y sin que nadie las vea. El jugador inicial le da la vuelta a la primera carta de su mazo, seguido por el resto de los jugadores.
Las cartas de mosca se colocarán en el centro de la mesa. En el momento en que un jugador muestre una carta de matamoscas, todos los jugadores intentarán atrapar las moscas usando sus dos manos (una para cada mosca) o sólo una (en caso de que jueguen 5 o más personas). Sin embargo, no todas las moscas son válidas.
Sólo recibirán puntuación aquellas moscas atrapadas que posean un color mayoritario, es decir, si hay dos moscas azules, una amarilla y una roja en el centro de la mesa, sólo conseguirá puntos el jugador o jugadores que atrapen las moscas azules. En caso de empate, es decir, si encontramos dos moscas azules, dos amarillas y una roja, tanto las azules como las amarillas serán válidas. Este jugador o jugadores cogerá estas moscas y las colocará a su lado, en un mazo de puntuación.
Por su parte, el resto de jugadores que por las prisas y los nervios haya atrapado moscas de otro color quedarán penalizados eliminando la última mosca atrapada de su mazo de puntuación (esto sentará especialmente mal si la última mosca atrapada tenía una alta puntuación). Además, devolverá las moscas no válidas al centro de la mesa.
Por su parte, si ya hay cuatro moscas de colores diferentes en el centro de la mesa y un jugador saca una mosca de un quinto color, ésta actuará como matamoscas. Así, todos los jugadores deberán poner sus manos nuevamente encima de las moscas de colores mayoritarios, realizando lo mismo que si hubiese salido una carta de matamoscas.
Cuando las cartas se acaben, habrá acabado la partida. El jugador con mayor puntuación habrá conseguido la victoria. Si hay varios jugadores con los mismos puntos, ganará el que posea el mayor número de cartas.
