El pasado año, Nuclear Tales presentaba Out Of The Box, una apuesta que prometía no dejar indiferente. ¿El motivo? Su original argumento, centrado en un portero de una popular discoteca. Warren Baker es el encargado de decidir quién accede al local, tras un pasado tormentoso que parece perseguirle en el presente.

Aún en desarrollo, sus creadores acaban de lanzar su demo. Con una duración en torno a los veinte minutos que muestra varias escenas del juego, hemos podido comprobar que el proyecto va por muy buen camino. Toma el humor como principal elemento para crear una aventura en la cual, la toma de decisiones será constante.

 

EL COMIENZO DE UNA NUEVA VIDA

Out Of The Box llegará a finales de este primer trimestre a Steam, en sus versiones para Windows, Mac y Linux. A la espera de su lanzamiento y mientras se ultima su desarrollo, sus creadores ya han puesto a disposición de los futuros jugadores su demo gratuita.

Nuclear Tales, encargados del título, es un nuevo estudio español formado por algunos de los creadores de Randal’s Monday, una aventura gráfica repleta de humor. Comparte con ella la capacidad de sacar una sonrisa al jugador, así como su diseño. Sus personajes y escenarios recuerdan, y mucho, a sus predecesores.

Por lo demás, todo es diferente. Unos minutos de juego han servido para comprobar que estamos ante un título con uno de los argumentos más originales de la historia. Su protagonista es Warren Baker, un grandullón que acaba de salir de la cárcel. Busca acercarse a su hija, a la que apenas conoce, pero para ello deberá asentarse en su nueva vida.

Un trabajo legal es un buen comienzo, por lo que no rechazará la oferta de un antiguo conocido: jornada laboral de siete horas durante todos los sábados como portero de una famosa discoteca, The Box. Para su desgracia, tal vez no sea tan legal como parecía a simple vista…

 

IDENTIFICACIÓN, POR FAVOR

La acción de Out Of The Box se desarrolla a las puertas de la discoteca. Ya ocupando su posición, Warren comienza a decidir qué personas entran al local y cuáles no. Las normas parecen dejarlo claro: nada de menores, de borrachos, de vagabundos, ni de gente con mochilas ni maletines. O, al menos, en algunos casos.

En el momento en que una de las personas de la cola cumpla con este perfil, tendrá que irse por donde ha venido. Por muchos insultos que se lleve el bueno de Warren. Si alguien es sospechoso de ser menor, bastará con pedirle la identificación para salir de dudas. Si es mayor entra.

Ahora bien, no todo es tan sencillo como pedir carnets y dejar entrar. En una noche nos encontraremos documentaciones falsas, gente que tratará de sobornarnos con dinero y los odiosos VIPS, con sus correspondientes privilegios.

Todos ellos tendrán comportamientos diferentes, que harán que dos jornadas nunca sean iguales, o acudirán solos, en pareja o en grupo. Ese lugar también será el escenario de peleas y, en caso de no poder solucionarlas por las buenas, llegará la hora de recurrir a la violencia.

Mientras resolvemos conflictos, es indispensable atender a la barra situada en la parte superior de la pantalla. Es ella la que nos indicará si vamos a buen ritmo, si debemos parar un poco antes de dejar entrar a más gente (un local lleno podría implicar la salida de otros tantos) o si estamos cumpliendo las normas.

 

¿CÓMO SE ME HA COLADO ESE TÍO?

Out Of The Box cuenta con un manejo extremadamente sencillo. Con el ratón, seleccionaremos la opción adecuada, ya sea dejar pasar, pedir documentación, hablar, pegar un puñetazo o expulsar. También tendremos un bloc de notas con algunas indicaciones y la lista de VIPS, entre otras utilidades.

En una jornada resulta habitual que dejemos entrar a gente que no debíamos. ¿Cómo se me ha colado ese tío? No siempre habrá tiempo de pedir identificaciones o de fijarnos en esos malditos maletines. Y eso sin contar con algún que otro fugitivo, con problemas con la policía…

En otras ocasiones, sí que seremos conscientes de que ha accedido alguien inadecuado, pero tal vez, no nos quedase otra opción que dejarle pasar… Todas las decisiones influirán en el mismo desarrollo de la historia. No sólo determinarán los beneficios obtenidos al final del día (y las multas), sino los acontecimientos en torno al trabajo. Porque esas jornadas se intercalarán con distintos momentos de la vida de sus protagonistas.

El jefe de Warren y su sobrino no parecen ser las mejores personas del mundo. Mantener su secreto a salvo nos daría estabilidad o, tal vez, podría volver a llevarnos a prisión. Confesarlo a la policía también podría tener consecuencias espantosas.

 

OUT OF THE BOX: CONCLUSIONES

Out Of The Box es una aventura atípica, que combina la toma de decisiones con la habilidad y la rapidez. Escoger la mejor opción a cada momento es tan importante como lograr que The Box tenga la mayor cantidad de beneficios económicos.

Se compondrá de un total de 32 jornadas de trabajo, que tal vez se queden algo cortas, con eventos en forma de fiestas de Halloween, San Patricio o Navidad. Por su parte, incluirá elementos propios de la gestión a la hora de decidir si pagar el gimnasio o la manutención de la hija.

Se convierte, de esta forma, en uno de los títulos más esperados del año. Vuelve a ser la prueba de que los juegos independientes tienen mucho que ofrecer.

En este caso, estamos ante la que parece ser una apuesta brillante en todos los sentidos: gráficos, jugabilidad y temática. Por supuesto, cuenta con unos cuidados diálogos en castellano, empapados de actualidad y homenajes, algo clave dada la gran importancia de la narración.

Sus creadores ya desarrollaron una aventura gráfica de sobresaliente y todo indica que volverán a repetir la fórmula. La calidad y el trabajo bien hecho son dos de las señas de identidad del equipo que, de seguir por este camino, le esperaría un futuro brillante en la industria de los videojuegos.

Con todo ello, recomendamos probar esta demo a quienes buscan juegos originales y diferentes al resto. A los que disfrutan con las historias de los personajes complejos. A todos los que quieren una aventura que avance en base a su propio esfuerzo.