La semana pasada, se hacía pública la lista con los nominados al Spiel des Jahres 2018, en sus tres categorías. El Kinderspiel des Jahres 2018 o lo que es lo mismo, el premio al mejor juego de mesa infantil, tuvo tres protagonistas: Emojito!, Dragon’s Breath y Panic Mansion.
A la espera de conocer el nombre del ganador, el 11 de junio, explicamos en qué consiste el primero de ellos. Además, analizamos sus puntos fuertes y débiles. ¿Son suficientes sus distintas opciones de juego? ¿Es, en definitiva, merecedor del galardón?
UN VISTAZO A EMOJITO!
Emojito! es un juego de mesa de 2 a 14 jugadores, con partidas de 20 minutos de duración. Recomendado a partir de los 7 años, es obra de Urtis Šulinskas, con ilustraciones de Tony Tzanoukakis. Ya ha sido publicado por Desyllas Games, HUCH! y Tactic.
Esta propuesta se define como un ‘party’, donde los participantes expresan sus emociones utilizando expresiones faciales o sonidos. Pueden hacerlo a través de tres modalidad distintas: cooperativa, competitiva o por equipos.
Modo cooperativo (2 a 7 jugadores)
Todos obtienen la victoria si se hacen con seis cartas de trofeo. En cada ronda, un participante se pondrá en la piel del actor, mientras que los demás serán los adivinadores. El actor inicia la ronda robando una carta de emoción para escenificarla.
Deberá atender al símbolo mostrado en el tablero, ya que le indicará si debe representarla con expresiones de la cara, con sonidos o con ambas. A continuación, roba seis cartas para barajar la suya entre ellas. Las coloca, boca arriba, alrededor del tablero.
Sin debates permitidos, cada adivinador votará por la que cree que es la emoción que su compañero ha representado. Tanto el actor como los adivinadores revelan sus soluciones para procederse al recuento de puntos de movimiento. Siguiendo una original mecánica, las fichas de equipo y de jugador avanzarán en función de los aciertos. Con los fallos, será la ficha del juego la que lo haga.
Cada vez que una pase la línea de meta, se obtendrá una carta de trofeo. El siguiente jugador se convertirá en actor, y así sucesivamente. Esta mecánica se repite hasta que los jugadores o el propio juego obtengan seis trofeos. Si son los jugadores quienes lo hacen, ganan la partida. En caso contrario, pierden.
Modo competitivo (3 a 7 jugadores)
La mecánica a seguir es la misma que en el anterior, aunque ahora, competirán por obtener más trofeos que sus compañeros. Es en la fase de recuento de puntos de movimiento donde el actor obtiene dos por cada acierto de los adivinantes. Los segundos obtienen tres por respuesta correcta. Quien obtenga seis trofeos, se lleva la victoria.
Modo por equipos (4 a 14 jugadores)
Se forman equipos de dos participantes, para seguir la misma mecánica, aunque con tableros individuales sobre los que efectuar el movimiento. Un acierto para cada emoción de su actor se traducirá en dos puntos para el equipo, mientras que al final de cada ronda se intercambian los papeles de actor y adivinador. El equipo ganador será quien obtenga tres trofeos.
EMOJITO!, ¿MERECEDOR DEL KINDERSPIEL DES JAHRES 2018?
A priori, Emojito! parece reunir los dos elementos clave en un juego de mesa infantil: beneficios y diversión. Estamos ante una propuesta que potencia la creatividad, la imaginación, la interacción con los demás y la identificación de sentimientos.
Enseñará a los más pequeños de la casa a mostrar emociones y a aprender cómo reconocerlas. Hacerlo mediante una puesta en escena basada en las risas es todo un acierto. Sus opciones cooperativas y competitivas, también.
Con él, los padres podrán conocer mejor la forma de expresarse de sus hijos. Obtendrán pistas que les permitan saber cómo ven las distintas emociones, pudiendo aplicarlo a la vida real.
A través de sus tres modalidades, se potencia la rejugabilidad. Además, cada una cuenta con distintas opciones y variantes, con las que añadir partidas aún más distintas. Sus puntos de movimiento se conforman como su elemento más original. No es para menos, ya que los aciertos se representarán mediante carreras hacia la meta.
Con ello, cumple con su función, a la vez que divierte durante un buen número de partidas (sobre todo con grandes grupos de jugadores). El jurado del Kinderspiel des Jahres 2018 habría valorado esa rejugabilidad, sus elementos originales, sus beneficios en los niños y su atractivo diseño que, dicho sea de paso, ha sabido aprovechar la moda de los emoticonos.
Sin embargo, tal vez hiciera falta algo más para que Emojito! se convirtiera en un fiel compañero del aprendizaje en las aulas y de las tardes de diversión. Quizás, la mecánica del clásico ‘party’ donde intercambiar roles para poner en práctica el arte de la adivinación ya esté demasiado explotada.
Las sensaciones que deja no parecen ser muy diferentes respecto a sus compañeros de género, lo que podría llevarnos a abandonarlo demasiado pronto. Por su parte, y a diferencia de otros tantos juegos infantiles, no funciona demasiado bien en adultos (resulta demasiado sencillo adivinar).
Sin ser un juego malo, no es capaz de destacar por encima de los demás. Al igual que se ha sabido reinventar la mecánica de la puntuación, no habría estado de más aplicar novedades en esa mecánica de adivinación o más opciones a la hora de representar las emociones. ¿Y qué tal un más que merecido cambio de nombre?
One thought on “Así es Emojito!, nominado al Kinderspiel des Jahres 2018”
Comments are closed.