Análisis: Dawn of Man

Dawn of Man

Aunque aún no se ha anunciado para Nintendo Switch, Dawn of Man encaja a la perfección con el catálogo de la consola. No es para menos, ya que supone un viaje desde la Edad de Piedra hasta la Edad del Hierro, donde recolectar, cazar, explorar y expandir nuestro asentamiento.

No sería la primera propuesta que combina los particulares controles de Switch con la lucha por la supervivencia y la gestión, aprovechando, además, los distintos accesorios con los que cuenta. Podría disfrutarse con sus  mandos, mejorando la experiencia. Si lo jugásemos con cascos, el sonido nos atraparía incluso de noche.

Una nueva raza de mamíferos inteligentes comienza a reunirse en tribus. Estos bípedos saben refugiarse del clima, gracias a unos cuantos palos y a varias pieles de los animales que cazan. Si son observados detenidamente, comprobamos como empiezan a desarrollar un comportamiento social y de cooperación entre ellos, tras un tiempo juntos.

Han pasado de comer bayas a cazar mamuts y osos, con la creación de diferentes armas tras haber recolectado todo tipo de materiales. Empezaron recogiendo palos y piedras. Después, se dieron cuenta de que el sílex podría resultar más útil. Sus vidas cambiaron al encontrar la posibilidad de plantar semillas para después cosecharlas. Y ya se han aventurado incluso a domesticar animales… Analizamos Dawn of Man, el nuevo juego de Madruga Works.

 

DAWN OF MAN Y LA EVOLUCIÓN HUMANA

Como punto de partida, Dawn of Man recurre a la aparición de los primeros humanos en tribus. Al juntarse, su crecimiento hasta nuestros días ha sido arrollador. Sin embargo, los graves problemas que los primeros tuvieron que sortear en los primeros años como grupo fueron de una categoría superior.

Dawn of Man

Esta novedad ha pasado un tiempo en acceso anticipado, puliéndose como juego y aprovechando las críticas de la comunidad. Su versión completa acaba de ver la luz, estando ya disponible en Windows y Mac. Steam es la plataforma escogida, a un precio de 20,99 euros (17,84 euros con el descuento de lanzamiento).

Estamos ante un juego independiente de gestión, supervivencia y simulación, que recurre a la construcción de ciudades y a los toques estratégicos. Puede disfrutarse por completo en castellano y contiene una interfaz clara y sencilla de utilizar. Es obra de Madruga Works, responsables del conocido Planetbase.

 

DE LA EDAD DE PIEDRA A LA EDAD DE HIERRO

El largo período que abarca el juego implica que esté repleto de acontecimientos. Además de convivir con animales que ahora están extintos, como el mamut o el rinoceronte lanudo, vemos lo complicadas que resultaban las cosas cuando se buscaba comida, con enfrentamientos contra peligrosas especies.

Dawn of Man

Los leones de las cavernas, entre otros, serán también depredadores dispuestos a merendarse a unos cuantos miembros de la tribu. En esos momentos, la cooperación es clave para no acabar exterminados.

No sólo los animales pueden devorar. Una mala gestión a la hora de conseguir comida puede hacer que nos quedemos sin nada que echarnos a la muela, con la consiguiente muerte de los pobladores. Se agrava con la llegada de un duro invierno, donde estaremos pendientes de las reservas de comida, pero también de las pieles con las que vestir a los miembros.

A medida que vayamos avanzando en las diferentes etapas, comprobaremos como es más fácil conseguir alimentos. No quiere decir que, por ello, podamos sobrevivir sin problemas. Las «comodidades» de los adelantos tecnológicos de nuestros pobladores, el aumento de la tasa de natalidad y el incremento del número de refugiados atraídos por nuestra organización crecerá. Así, es preciso hacer crecer las reservas de forma paralela.

Los saqueadores siempre son un peligro. En los primeros momentos serán pocos y no estarán muy armados. Al avanzar en el tiempo, serán más numerosos y estarán mejor preparados. Tendrán como misión acabar con nuestro tranquilo y pacífico lugar. Para defendernos, podremos recurrir a empalizadas y murallas que, junto con las puertas y las torres, son una potente herramienta defensiva.

 

CONOCIMIENTOS Y FE

A lo largo de Dawn of Man, es preciso adquirir conocimientos, traducidos en nuevas tecnologías. Si cazamos muchos ciervos o adiestramos a muchos animales, nuestra experiencia en estas tareas como tribu será más grande, obteniendo puntos de conocimiento.

Las tecnologías se desbloquean por medio del almacenamiento de conocimientos o comprando las que algunos mercaderes nos traen. El dinero no existe, por lo que recurrimos al intercambio de bienes para cerrar tratos. Por otro lado, la fe resulta muy importante si queremos tener a nuestros pobladores contentos y con sus habilidades al máximo.

Dawn of Man

La falta de fe implica que los miembros de la tribu estén tristes. Al principio, un par de palos y piedras serán suficientes para crear tótems que calmarán la necesidad de fe. Con el paso del tiempo, necesitaremos edificios religiosos más grandes si queremos mantener la productividad de nuestras gentes.

 

LOS MODOS DE JUEGO

Dawn of Man cuenta con varias modalidades. La primera de ellas, y la que más libertad proporciona, es el modo Juego Libre. La segunda son los Desafíos, mientras que la tercera, más que una modalidad en sí, da rienda suelta a la comunidad para que cree y añada más posibilidades.

Juego Libre

En Juego Libre, encontramos tres escenarios diferentes. Amanecer Continental ofrece una experiencia con la que aprender a jugar. De dificultad normal y con muchos desafíos, es preciso jugarlo para desbloquear el segundo: Tierras Norteñas.

Como es lógico, se incrementa el nivel de dificultad. El frío y la escasez de alimentos son más abundantes que en el escenario anterior. Es casi obligatorio jugarlo para desbloquear Guerreros Primitivos. En éste, tendremos que hacer uso de todo lo aprendido en los otros dos escenarios y sacar nuestro lado más estratégico y hábil para conseguir sobrevivir. Los ataques por parte de los saqueadores son más comunes.

Desafíos

Dentro de Desafíos, aparecen seis posibilidades. Dos de ellas toman como referencia las características de un ‘sandbox’. Nos ubicarán en tierras con abundantes recursos y casi sin peligros. La primera nos emplaza en la Edad de Piedra y la segunda en la Edad de los Metales. La libertad de imaginación estará presente en ambas.

Por otro lado, encontramos otras cuatro más concretas. En una de ellas, tenemos que ayudar a sobrevivir a una manada de rinocerontes lanudos y, en otra, a una manada de mamuts. Estas dos posibilidades nos darán un enfoque de juego diferente, ya que no controlaremos a humanos sino a animales.

Las restantes nos llevan a construir un enorme templo para hacer felices a los pobladores y a conocer un punto de vista más cercano al mundo del pastoreo, respectivamente. Todos ellos tendrán que ser desbloqueados completando los anteriores.

 

DAWN OF MAN: CONCLUSIONES

Madruga Works ofrece una experiencia de juego muy notable con Dawn of Man. Reviviremos, de manera muy fiel, los tiempos de los primeros humanos «modernos». Nos enseña sus formas de vida, por lo que podríamos decir que la jugabilidad y la educación van de la mano.

Dawn of Man

Es muy didáctico e ideal para aprender cómo fueron los tiempos comprendidos desde la Edad de Piedra hasta la Edad de Hierro. Por tanto, podemos estar ante un complemento perfecto que potencie la enseñanza de este tema.

Será preciso poner a funcionar nuestra cabeza para que el asentamiento crezca. A su vez, tendremos que protegerlo, suministrar víveres y conseguir evolucionar. La capacidad de planificación por nuestra parte saldrá de su letargo para abastecernos de comida y ropa cálida antes de los inviernos más duros.

No estamos ante una novedad para los que buscan acción, pero sí para los que quieren títulos rejugables basados en la estrategia y la gestión. Quienes se sientan atraídos por el género disfrutarán con este segundo juego del estudio. El avance en base al progreso y las explicaciones naturales, a base de jugar, así lo permitirán.

Con ello, Dawn of Man no es un juego que, para empezar, nos exija ser expertos en la gestión. Con tener un mínimo conocimiento y recurrir al tutorial es suficiente. Éste resulta muy eficaz y, además, no nos desvela nada. Así, las sorpresas como gran atractivo estarán siempre presentes.

Ésta puede ser una desventaja para los habituales, a los que quizás les llegue a resultar un poco pobre. Sin ir más lejos, en ocasiones las esperas marcarán las partidas. No es posible obligar a un determinado miembro de la tribu a realizar algo, sino que actúan por prioridad de forma automatizada.

Como se puede comprobar en las imágenes y en el vídeo, no se busca tener unos gráficos de gran calidad, pero tampoco se descuidan. Los movimientos de los habitantes de la tribu son creíbles. Tanto en ellos como en los animales aparece la opción de hacer ‘zoom’ para ver la forma en que desarrollan sus vidas.

 

Dawn of Man Steam nota