Inglaterra. 1928. Todo está listo para la cena de gala celebrada por el rico heredero Zachary. Entre sus invitados, influyentes personalidades internacionales, hay un ladrón profesional (con sus cómplices). Utilizando dinero como cebo, y gracias a los detectives infiltrados, la policía tratará de darles caza. Así es One Night.

 

ROLES OCULTOS Y OBJETIVOS CONTRAPUESTOS

One Night es un juego de tablero creado por Rafael Prado e ilustrado por Lâle Favre. Pensado para grandes grupos, ofrece retos de 4 a 8 participantes, de 15 minutos por jugador, recomendados a partir de los 12 años.

Fabricado por El Troquel, ya está abierta la fase de pre-pedido de su primera edición (castellano, inglés y francés), prevista para este mismo mes de octubre. Tiene un precio de 49,99 euros.

Trasladados a una mansión, donde está todo preparado para atrapar a los ladrones, los jugadores se dividen en bandos. A través de los roles ocultos, contarán con objetivos contrapuestos. Se moverán por el tablero, realizando acciones que resulten favorables a sus intereses.

Mientras que la policía obtendrá puntos al arrestar a los ladrones, con su muerte y al confiscarles el dinero, los ladrones aumentarán su puntuación con la muerte de los policías y al huir si llevan consigo el dinero.

Una partida

El primer paso es preparar el escenario y repartir las identidades, en base al número de jugadores. Sólo el ladrón profesional y el inspector jefe revelarán su carta de rol. La partida se desarrollará en doce rondas, equivalente a doce horas.

Será durante su turno donde cada jugador lance la ruleta. El resultado determinará el movimiento del peón por el tablero, así como la realización de acciones. Destaca la búsqueda en la mansión, con la obtención de una carta.

Las distintas cartas de objeto también pueden ser utilizadas. Entre sus funciones, permiten esposar, infligir daño, recuperar vida u obtener movimiento extra. Al situarse al lado del peón de otro jugador, podrá comerciar, robar una carta, empujar o susurrar un secreto.

Gana el bando que reúna diez puntos. Si ninguno lo ha conseguido a las siete de la mañana, hora tras las doce rondas, el reto termina. Vence el que tenga más puntos.

Los ladrones habrán obtenido puntos con la muerte de los policías y al huir en bote, en moto y en coche, con capacidad para uno, dos y cuatro, respectivamente. Necesitarán la llave del vehículo utilizado y escapar con el dinero. La policía recibirá puntos con la muerte de los ladrones, con los arrestos y al confiscar el dinero a uno de ellos.

 

ONE NIGHT: PRIMERAS IMPRESIONES

Tensión en el ambiente. Robos, detenciones, asesinatos. Estos elementos dan vida a One Night, propuesta que guarda semejanzas temáticas con Cluedo, 10 Negritos, Incómodos Invitados y Asesinato en Hong Kong.

Es inevitable pensar en estos tres títulos al descubrir esta novedad. Recoge lo mejor de ellos en cuanto a ambientación, creando en los jugadores sensaciones parecidas al terror e incluso a la angustia. Tendrán que lograr el objetivo mientras son víctimas de los planes contrarios. Mientras reciben heridas causadas por cuchillos. Por pistolas.

Respecto a su jugabilidad, la cosa cambia. No hay elementos en común con estas propuestas, aunque quizás sí con How to Rob a Bank y con Cerbero. Con esa combinación entre competición y cooperación en base al rol que se desempeñe. Con la huida marcada por las plazas de un vehículo, en el caso del segundo.

A partir de ahí, todo lo demás es novedad. Sorpresas en estado puro. El elemento central de One Night es una ruleta, capaz de condicionar todo el transcurso de la partida. Mientras aplicamos el despiste y la deducción, tratando de ir un paso por delante de los demás, será el azar el que determine el movimiento y las acciones a realizar.

La libertad estratégica promete formar parte de cada turno, donde el jugador decidirá qué hacer dentro de las posibilidades. Habrá numerosos planes por llevar a cabo, siempre en base al transcurso de la partida y a la forma de jugar de los demás.

La ruleta añade rejugabilidad, llevándonos a improvisar sobre la marcha, adaptándonos a la situación. Comparte protagonismo, en cuanto a originalidad, con el marcador de puntos. Cada vez que uno de los bandos consiga uno de sus logros, se desplazará hacia su lado. Esto significa que el contrario habrá perdido los puntos que hubiera ganado previamente (o una parte de ellos).

Este sistema de balanza resulta más que acertado, permitiendo dar la vuelta a las partidas en determinados momentos. Siguiendo con los elementos que no acostumbran a aparecer en otros juegos, encontramos la opción de ahorrar los pasos no gastados para utilizarlos en un siguiente turno.

One Night, marcado por la esencia de los roles ocultos y de la planificación de acciones, se completa con la gestión del tiempo. Para quienes vayan perdiendo, doce turnos tendrán que ser aprovechados para remontar al rival. Para los vencedores, será un aguante por seguir manteniéndose en el lado de la victoria.

La unión entre ataque y defensa y robos y huidas se ve adornada con numerosos detalles. No estamos ante un juego complicado, aunque sí que aparecen varios puntos a recordar. Podríamos estar ante un reto de dificultad media, indicado para los que ya estén familiarizados con los juegos de mesa y, por descontado, para los expertos en el faroleo.

El perro del inspector, con sus mordiscos y su apetecible chuletón, el martillo para romper las ventanas, el agua y los movimientos bloqueados forman parte de One Night, junto a la necesidad de atender a las llaves de cada vehículo y a su capacidad.

Por lo general, necesitaremos encontrar los mejores objetos, mientras alejamos todo lo posible los que el rival necesita (si es que realmente es nuestro rival). La observación y la lógica también deberán utilizarse como herramientas para la victoria.

Ideal para grupos grandes de jugadores, añade el rol del convenido a los encuentros entre un número impar de participantes. Éste tendrá que hacer todo lo posible por terminar la partida en un empate (punto arriba, punto abajo), pudiendo ayudar a un bando o a otro en la medida de lo posible.

Por su parte, su autor trata de solucionar la eliminación de jugadores. Aquellos personajes que pierden toda la vida, tendrán opción de regresar. Contarán con una desventaja importante, pero tratar de superar lo aparentemente imposible siempre es mejor que quedarse de brazos cruzados, viendo como los demás se divierten.

Con todo, One Night promete hacer las delicias de los amantes de las persecuciones, del despiste y de las misiones en equipo. Se apoya en un manual de instrucciones muy claro, donde conocer al detalle la historia de cada personaje. Su diseño resulta espectacular y los símbolos de sus cartas no podían ser más intuitivos.

 

COMPONENTES DE JUEGO

• 75 Cartas
• 18 Fichas de Madera
• 9 Peones de Madera
• 16 Fichas de Hexágono
• 8 Escritorios
• Bote
• Motocicleta
• Coche
• Ruleta
• Tablero
• Guía Rápida
• Instrucciones (castellano, inglés, francés)