Los Campos Elíseos nos esperan para la última carrera. Antes, tendremos 20 etapas de espectáculo para los seguidores (y de sufrimiento para nosotros). Los primeros días suelen ser para sprinters o para especialistas de pavés. Dentro de lo que cabe, se puede llevar.
El infierno aparece en la montaña. Los Alpes o Los Pirineos nos destrozarán físicamente y, también, mentalmente. No hay nada como las jornadas de descanso en las que recuperar el aliento. Admiro como los favoritos se mantienen arriba. Eso sí, aunque no seas el mejor, siempre se puede optar a una victoria de etapa, ya que las caídas y las escapadas pueden descontrolarse. Es algo que da esperanza.
Sin ir más lejos, es así es como gané una de las etapas más locas que he vivido. En la última ascensión de tercera categoría, mi cuerpo empezaba a no responder. Por suerte, logré aguantar con los favoritos. Tocaba descender, con la meta al fondo.
La caída del primero del grupo hizo que más de la mitad se viese en el suelo. Otros tantos, apretando frenos. Mi decisión fue la de cerrar los ojos y no frenar. Me encontré solo a un kilómetro de la meta en bajada, lo que se tradujo en victoria y alegría. Así es Tour de France 2020.
TOUR DE FRANCE 2020: PREMIO A LA CONSTANCIA
Tour de France 2020 se aleja de su hermano mayor, Pro Cycling Manager 2020. Cyanide y Nacon apuestan por un simulador deportivo de ciclismo, puro y duro. Lo podríamos definir como el juego que va directamente a la diversión y nos lleva, sin miramientos, a las carreras ciclistas.
Desde un punto de vista en primera o en tercera persona, según elijamos, tendremos que manejar al ciclista. Literalmente. Es posible cambiar y alternar entre los integrantes del equipo. Los ciclistas que no utilicemos avanzarán automáticamente.
Es muy distinto a lo que podemos ver en el otro juego de Cyanide y Nacon, que tira mucho más a la gestión. Este Tour de France 2020 es una apuesta perfecta para consolas. Acaba de lanzarse en PS4 y Xbox One, por 49,99 euros, con la interfaz en castellano. Será en verano cuando vea la luz también en PC.
¡Ojo al dato! Necesitaremos 30 GB para disfrutar de este juego que duplica el almacenamiento de su hermano de gestión. La principal razón no es otra que su apuesta por ser un corredor, en lugar de un mánager. El énfasis radica en la carrera.
LOS MODOS DE JUEGO
Esta propuesta cuenta con diferentes modalidades. En el Modo Carrera, disputamos, con el equipo que escojamos, diferentes carreras del panorama ciclista. Para desbloquear las muchas carreras disponibles, tendremos que comenzar por la reina: el Tour de Francia.
Iremos consiguiendo puntos con nuestros resultados para desbloquear otras como la París-Niza. No faltan las clásicas. Una de las principales novedades de este año es la integración de Liège como carrera con licencia y accesible en el juego.
Es en el Modo Desafío donde pondremos a prueba nuestras habilidades. Permite medirnos contra la inteligencia artificial o contra otro jugador en descensos o sprints, dos de los aspectos más complicados de dominar.
El Modo Equipo Pro se conforma, junto con el siguiente, como el más atractivo. Tendremos que crear un equipo y, con un bajo presupuesto, hacernos con los corredores disponibles y adaptables a un nivel bajo o con corredores jóvenes, dispuestos a unirse a nuestras filas.
Después, será momento de disputar carreras del calendario del juego, recibiendo puntos en función de la clasificación para obtener, al siguiente año de competición, acceso a carreras mejores con las que subir el prestigio. De esta forma, podremos contratar a mejores corredores.
Al igual que en el anterior, en el Modo Líder Pro habrá que conseguir puntos para desbloquear carreras. Como diferencia, aparecen los objetivos personales para mejorar como corredor. Se debe a que querremos convertirnos, individualmente, en un gran campeón.
GANAR ETAPAS Y CARRERAS
Si hay algo que nos obliga a hacer Tour de France 2020 es ganar. Llegar a ese punto es complicado. No es posible tomar las riendas del líder del equipo y pretender ganar la etapa sin utilizar a nadie más. Sólo ocurre cuando tenemos un corredor con mucho talento y atributos altos y lo utilizamos en una carrera con bajo prestigio. Sin rivales fuertes, podremos hacernos con la victoria con un único corredor.
La gloria conlleva mucho esfuerzo. A lo largo de cada etapa, tendremos que ordenar a los corredores distintas tareas para que nuestro líder salga victorioso. Esto se asemeja a Pro Cycling Manager 2020. Sin embargo, aquí las cosas bien hechas se realizan a mano.
Para lanzar a un corredor, o prepararlo para una subida, muro o tramo de pavé, necesitamos controlar nosotros mismos a esos gregarios que hacen el trabajo sucio. Hay que tener un especial cuidado a los descensos y a las curvas cerradas, siendo preciso tomarlas nosotros mismos.
En jugadores que no hayan completado el tutorial, puede significar no mantener el ritmo de los demás o que nos cansemos muy rápido. Se perderán, por tanto, las opciones de ganar.
TOUR DE FRANCE 2020: CONCLUSIONES
Todo lo que nos ofrece el juego dentro de la etapa, en cuestión de control de esfuerzo del ciclista, forma parte de un perfecto círculo. El avituallamiento, la barra circular de energía y la de esfuerzo, mostrados en la parte inferior derecha de la pantalla, están muy bien logrados.
Funcionan como nuestro centro de mando, puesto que ayuda enormemente a entender la puesta en escena y la esencia de Tour de France 2020. Los tutoriales, con frecuencia tediosos, acostumbran a servir para iniciarse.
En esta entrega, no podremos sobrevivir sin ellos. Son interesantes, ya que ofrecen trucos para no desfondar a los corredores al hacer un esfuerzo extremo, vitales para alcanzar objetivos. Detalles como saber cuándo no conviene pedalear y recurrir, por ejemplo, a los descensos en recta para coger una postura aerodinámica, pueden marcar la diferencia.
La inmersión es cada vez mayor en la saga, gracias a la primera y a la tercera persona. Este año también se ha mejorado en ese aspecto, con nuevos puntos en las carreras al detallarlas más y acercarlas a la realidad, en jugabilidad.
Si bien los gráficos no son primitivos, sí que necesitan una renovación en algunos puntos para optimizar la experiencia. Ocurre lo mismo con las animaciones y sus pequeños errores.
Las pruebas contrarreloj han mejorado notablemente. Ahora, podemos marcar diferencias de una manera más real. La parte negativa la encontrarán los mayores aficionados al ciclismo, por no tener algunas de sus carreras predilectas.
Aunque van en aumento, se echan en falta el Giro o la Vuelta. Sin embargo, está justificada la ausencia con su propio título. Otra «pega» son los controles. Requieren de una pequeña curva de aprendizaje al no ser del todo intuitivos.
Lo que está claro es que Tour de France 2020 se mantiene gracias al esfuerzo de sus responsables y a las mejoras que llegan edición tras edición. Aunque con frecuencia se conozca como la versión de consolas de Pro Cycling Manager, estamos ante títulos muy diferentes, incluso orientados a jugadores distintos.
Ambos son compatibles en una misma biblioteca, por las posibilidades ofrecidas por cada uno. Es necesario, no obstante, ser amantes de este sacrificado deporte para disfrutar al máximo de todas ellas.
Como en la vida real, se traducirá en horas de entretenimiento con sus modos adaptados a todos los gustos. Se conforma como una alternativa al retraso del Tour de Francia de este verano, de tal forma que no renunciemos a la emoción de las carreras en la época más calurosa del año.
Análisis realizado en su versión de PS4.