Tras su paso por PC, DROP – System Breach se estrena en Nintendo Switch. Acaba de aterrizar en la consola, de la mano de MicroProse. Ofrecerá controles sencillos, pero será uno de esos títulos difíciles de dominar.
ACCIÓN Y ESTRATEGIA EN DROP – SYSTEM BREACH
Estamos ante una aventura de puzles y exploración, con una complejidad y un ritmo que aumentan a medida que avancemos, al ritmo de la banda sonora electrónica. Se define como una experiencia de simulación de piratería. En ella, se dan cita la acción y la estrategia.
La velocidad, la astucia y el ingenio serán necesarios a la hora de hackear redes, analizar objetivos y elaborar planes, a ejecutar de la forma más rápida posible. Trabajaremos con el tiempo, pero también con cortafuegos. Un trabajo limpio será aquél que nos permita salir antes de que salten las alarmas.
Nos moveremos por una campaña de historia, con sus misiones. Nuestro personaje es el de hacker prometedor, no exento de ambiciones. Tiene la cuenta bancaria vacía y muchas ganas de demostrar lo que vale. Sus acciones llamarán la atención de un notorio grupo de hackers. A partir de ahí, todo se complica. La vida se pone patas arriba al entrar en la lucha entre facciones y megacorporaciones.