Ladrones de guante blanco es un juego de mesa en desarrollo, presentado por Ludo, Asociación de Creadores de Juegos de Mesa. Nos propone repartirnos el botín tras el asalto a una de las joyerías más lujosas de la ciudad.
ASÍ SERÁ LADRONES DE GUANTE BLANCO
Ladrones de guante blanco todavía se encuentra en forma de prototipo, sin planes de lanzamiento revelados por ahora. Es una creación de Raúl Gutiérrez Jiménez, Agustín F. Marín y Néstor Barreto.
De 3 a 5 jugadores se enfrentan en una competición familiar, de 15 minutos de duración, indicada desde los 7 años. Recurrirá al draft, a la memoria y al set collection como mecánicas principales.
La acción arranca tras el asalto a una joyería. Bajo la oscuridad de la noche, nos repartimos el botín en un callejón oscuro. A lo largo de tres rondas, de menos de 5 minutos cada una, recurriremos al tacto para identificar las joyas que más nos interesan. También nos servirá para descartar las falsificaciones.
Querremos ganar mucho dinero con la venta de pulseras, collares, tiaras y pendientes. Estas joyas acabarán en las fiestas de la alta sociedad y, por supuesto, la policía no puede sospechar nada.
Durante el robo, tomamos un saco de botín. Robamos seis gemas del saco de robo sin mirarlas y sin que nadie lo haga. De esta forma, quedarán ocultas en la mano.
En el intercambio, guardamos una de esas gemas en nuestro saco de botín. Pasamos las otras al ladrón de la derecha, de forma disimulada. Una vez esté repartido el botín, se procede a vender lo recaudado por cada uno. Con cinco gemas iguales se crea una tiara. Ganamos automáticamente la partida, convirtiéndonos en líder de los ladrones.
El collar se construye con cuatro gemas iguales. Se vende por diez monedas. Con tres iguales, tendremos una pulsera, equivalente a cinco monedas. Con dos iguales, unos pendientes. Su valor es de dos monedas.
Sus autores lo califican como un juego muy ágil, compuesto por piedras preciosas de plástico. 35 de ellas simularán joyas auténticas; siete las falsificaciones. Se completa con seis sacos: cinco de botín y uno de robo.
