La ruta Tokaido, establecida en el siglo XI, se compone de un total de 500 kilómetros. A través de ella, se unen las dos ciudades más importantes de Japón: Edo (hoy conocida como Tokio) y Kioto. Ésta da nombre a un popular juego de mesa, que se lanza ahora en su versión en castellano.
Basado en el sistema de colección de cartas, los jugadores emprenden un viaje que les llevará a descubrir los preciosos paisajes de la ruta, a disfrutar de deliciosas comidas y a comprar varios souvenirs. Los distintos encuentros harán de ella una experiencia aún más rica.
¿SOUVENIRS O DONACIONES AL TEMPLO?
Tokaido es un juego de mesa de 2 a 5 jugadores, con partidas de 45 minutos de duración. Creado por Antoine Bauza (7 Wonders) e ilustrado por Naïade (El Gran Libro de la Locura), se incorporará al catálogo de Devir entre este mes de junio y julio, tal y como ha confirmado la editorial.
A través de una sencilla mecánica de juego, englobada en el género ‘set collection’, los jugadores inician un viaje por la ruta Tokaido. En esta ocasión, el ganador no será quien la complete en primer lugar, sino quien la haya aprovechado mejor a través de la suma de puntos de victoria.
Tras colocar el tablero en el centro de la mesa, con los correspondientes mazos de cartas, cada jugador seleccionará dos tarjetas de personaje al azar. Escogerá uno de ellos, con sus correspondientes monedas iniciales y con una habilidad. Estas tarjetas cuentan con una peculiaridad: un hueco para introducir una ficha que marcará el color del jugador.
Se colocan los peones en las casillas iniciales y comienza la partida. Durante su turno, cada jugador avanzará hacia una casilla vacía a su elección. Hay que tener en cuenta que, el jugador cuyo viajero se encuentre más alejado de la casilla final, será a quien corresponda el turno.
Tras mover a su viajero, llevará a cabo la acción correspondiente a la casilla en la que se encuentre.
Casillas de Tokaido
Pueblo. El jugador roba las tres primeras cartas del mazo de souvenirs. Puede comprar cualquiera de ellas. Hay que tener en cuenta que estos recuerdos se dividen en objetos pequeños, ropa, bebidas y comidas y arte.
Las cartas que decida comprar las incorporará a su lado de la mesa, organizándolas en sets, y se anotará la puntuación correspondiente en el marcador. Un souvenir otorga un punto. El siguiente, si es de distinto tipo, le reportará tres. Los otros, cinco y siete, respectivamente. Si juntase un souvenir del mismo tipo, sólo sumaría un punto adicional.
Los puntos se anotarán a la hora de adquirir las cartas. Es obligatorio que el jugador tenga al menos una moneda para parar en esta casilla, aunque no es imprescindible comprar algo.
Granja. Añade tres monedas a su reserva.
Panorama. Si el jugador aún no tiene ninguna carta de panorama, que representan varios paisajes, tomará una de valor uno. A partir de ahí, deberá coger la del siguiente valor hasta completarlo.
Sólo es posible completar un panorama por partida y, una vez terminado, el jugador no podrá caer en esta casilla. Se anotan los puntos correspondientes a cada carta.
Primavera Calurosa. Roba una carta del mazo correspondiente para añadirla a la colección, que le reportará dos o tres puntos.
Templo. El jugador donará una moneda como mínimo y tres como máximo al Templo. Por cada una, se anotará un punto de victoria. Los jugadores que más donaciones hagan, tendrán una recompensa al final de la partida.
Encuentros. Se roba la primera carta del mazo de encuentros para añadirla a la colección. El personaje con el que se haya encontrado dará una ventaja, ya sea en forma de puntos, monedas o cartas de souvenir o panorama.
Posadas. Representan el lugar en el que los viajeros comen. Cada uno está obligado a parar en las cuatro del camino, aunque no a comer.
En función del orden de llegada, podrán adquirir unas cartas de comida u otras, a mayor o menor precio. Cada una reporta seis puntos y no se podrá probar la misma comida dos veces en la partida. Cuando todos hayan llegado, continuará el viaje.
A lo largo de la partida, los jugadores se irán anotando los puntos correspondientes, pero es necesario guardar todas las cartas conseguidas. Cuando todos lleguen a la última casilla, la partida finaliza, procediéndose al recuento de puntos.
El jugador que más monedas haya donado al Templo se anotará diez puntos. Los siguientes, siete, cuatro y dos, respectivamente. Deberán tenerse en cuenta, además, las cartas de objetivo. Tres de ellas se repartirán a lo largo de la partida; otras cuatro al final.
Las tres primeras premian a quienes completen un determinado paisaje en primer lugar. Las otras cuatro serán para quien haya gastado más dinero en comida, para el que tenga más cartas de primavera calurosa, para el que haya tenido más encuentros y para quien tenga más cartas de souvenir.
Todo ello se premia con una bonificación de tres puntos. El ganador será el participante que tenga más puntos en el marcador una vez estén anotadas estas bonificaciones finales.
LAS PRISAS NO SON BUENAS, ¿O SÍ?
En Tokaido, toda la acción recae en el tablero. Es en él donde se colocan las cartas, en función de su tipo, donde se anota la puntuación y el lugar en el que se desarrolla el viaje, marcado por una línea.
El orden prima a lo largo de toda la partida, creando una experiencia sencilla, pero repleta de posibilidades. Ya hemos visto como el turno es para el jugador que vaya en última posición. Los planes estratégicos se hacen necesarios desde el mismo movimiento.
Puedo avanzar hacia una casilla de panorama, con el objetivo de completar mi paisaje a tiempo, y llevarme unos puntos extra. Y, ya de paso, llegar a la posada antes que el resto, para comprar la comida más barata (y reservar las monedas para los souvenirs o para las donaciones al Templo).
Por el contrario, puedo avanzar poco a poco, aprovechando las posibilidades que ofrece cada casilla. Y dado que todos tendrán que esperarme a que coma algo, no iré con desventaja. A cambio, veré como las mejores casillas ya se encuentran ocupadas, algo que me hará ponerme en primer lugar en más de una ocasión, perdiendo así la oportunidad de movimiento.
Ahora bien, ¿qué casillas me convienen más? Como juego del género ‘set collection’, no hay cartas mejores que otras, sino que el resultado se determina con la estrategia seguida. Si bien es cierto que merece la pena tener las máximas cartas posibles de souvenir y panorama, y apostar por una buena donación, no hay que descuidar el resto.
Las granjas son claves para conseguir monedas (sin ellas poco se puede hacer), mientras que las otras proporcionan unos puntos extra, que tampoco conviene dejarlos escapar. Si estamos pendientes de cuántas tienen los otros participantes de cada tipo, quizás podamos aprovechar los últimos turnos para obtener las máximas hasta igualarles o superarles, beneficiándonos de los puntos extra finales.
Para evitar partidas repetitivas en las que uno siempre gane por llevar a cabo su mejor plan, Tokaido introduce las habilidades de los personajes iniciales, así como variantes. Entre ellas, aparece la posibilidad de efectuar el viaje en sentido contrario.
Tokaido gustará a los amantes del género. Disfrutarán coleccionando cartas y de la libertad de acciones a través de movimientos elegidos por el propio jugador. Su estética es un aliciente de peso para hacerse con el juego, tanto o más que sus mismas reglas.
La combinación de colores armónicos, la importancia del blanco y los dibujos inspirados en el arte japonés, transportan a sus participantes a un universo lejano, fruto del trabajo de un ilustrador de lujo.
Por contra, hay que tener en cuenta que las partidas para dos jugadores no son las más atractivas. En ellas, se introduce la figura de un viajero neutral, que deberá moverlo el jugador que vaya en último lugar en el trayecto. Y quienes acostumbren a disfrutar de juegos con dos personas ya sabrán que tener que estar pendientes del jugador fantasma no invita a la competición…
Como curiosidad, Tokaido cuenta con las expansiones Crossroads y Matsuri, así como con varios packs de cartas de personaje. Éstas añaden nuevas cartas de personaje, de amuleto, de objetos legendarios, de caligrafía o de cerezos, así como un dado de la fortuna, que se disponen sobre un pequeño tablero, entre otros componentes. Sólo queda esperar para saber si Devir las publicará también en castellano.
COMPONENTES DE TOKAIDO
- 24 Cartas de Souvenir
- 25 Cartas de Comida
- 60 Cartas de Panorama
- 12 Cartas de Primavera Calurosa
- 14 Cartas de Encuentro
- 10 Tarjetas de Viajero
- 50 Monedas
- 5 Fichas de Jugador
- 5 Marcadores de Puntos
- 5 Peones de Viajero
- Tablero
- Instrucciones