El objetivo final de Goblins en la mina es hacerse con el mayor número de lingotes. Éstos se encuentran escondidos en la mina y, para adentrarse en ella, es preciso contar con un buen equipo de goblins currantes. Ellos son los encargados de cargar los valiosos tesoros, pero poco podrían hacer por sí mismos.
Sin una panda de goblins profesionales que se enfrente a monstruos y contratiempos, estarían muy lejos de su objetivo. Estos últimos también son los protagonistas en los enfrentamientos en las mazmorras de los rivales y, por descontado, son la defensa que necesita el propio jugador.
Un equilibrio entre ambos tipos de goblins es el primer paso hacia la victoria. La construcción de aposentos y las cartas de sucesos hacen el resto. En una combinación entre estrategia, azar, riesgo y caos, este juego de cartas acaba de llegar a las tiendas, con enfrentamientos de 2 a 6 jugadores. Creado por Lisi Franch y Alberto Gandía, cuenta con ilustraciones de David Ramon. Resumimos su mecánica de juego en este Plano Detalle.