Héctor Vargas no ha tenido el mejor de sus finales. Se atragantó con un corcho mientras trataba de abrir una botella de champán, y nadie pudo hacer nada por su vida. Dado que era dueño de un imperio millonario, no tardaron en hacer su aparición distintos «allegados», como su cocinera privada o el primo lejano.

Hasta siete personajes tratarán de heredar la enorme fortuna de Vargas, recurriendo a la mentira y a la investigación a través de recursos. Los Impostores llegará a las mesas de juego en los próximos meses.

FICHAS DE DINERO, PRESTIGIO Y PRUEBA

Los Impostores se presenta como un juego de mesa de 3 a 7 jugadores, diseñado por Bill Eberle, Ned Horn, Jack Kittredge y Peter Olotka. Edge nos trae la segunda edición, traducida al castellano.

En ella, ha aumentado el número de jugadores (antes era hasta seis) y se han incluido hojas de referencia y una nueva forma de puntuación, que invita a jugar varias rondas seguidas. Prevista para este segundo trimestre del año, ya se conoce su precio: 12,95 euros.

Este juego de cartas gira en torno a la muerte de Héctor Vargas. No consiguió su fortuna de la forma más limpia y honesta, por lo que es de esperar que sus conocidos tampoco lo hagan con su herencia. Todos se reúnen en una habitación, tratando de descubrir las mentiras.

El más inteligente, capaz de aprovechar bien sus habilidades, su falta de consideración y su sexto sentido a la hora de engañar al resto, será el merecedor de todo el imperio del difunto. Antes de empezar, cada jugador recibe una carta de personaje, que deberá permanecer oculta ante los demás, y fichas de dinero, prestigio y pruebas con las que comenzar la investigación.

Con las mentiras, irán recibiendo más recursos para investigar y acusar, y así sucesivamente. La forma de eliminar a los rivales es descubriendo sus mentiras, aunque una acusación incorrecta puede llevar a la propia eliminación.

Una acusación se realiza entregando al jugador en cuestión la carta que suponemos que muestra su identidad. Si es correcta, éste quedará eliminado sin que nadie sepa su identidad. Si no lo es, el eliminado será el que ha realizado la falsa acusación.

El objetivo es evitar las acusaciones y realizarlas de la forma adecuada, disimulando las mentiras. Las acusaciones se llevan a cabo a través de la investigación, que tiene su origen en los recursos obtenidos a lo largo de la partida.

Una ficha de dinero, otra de prestigio y otra de prueba contra un jugador se traducen en la entrega de cuatro cartas de sospecha por parte del acusado. Una de ellas deberá corresponderse con la identidad real. En combinación con otras pistas e investigaciones, puede crearse una sólida teoría acerca de las identidades.

Para obtener los recursos, es preciso llevar a cabo la habilidad de un personaje, independientemente de que sea o no el propio. Así, una buena mentira nos puede llevar a hacer la habilidad del primo lejano aunque tengamos a la ex, a la amante o al jardinero.

Tras anunciar la elección, pueden ocurrir dos cosas: que nos crean o que no. En el primer caso, realizaremos la habilidad escogida. En el segundo, al grito de «¡Impostor!», todos deberán debatir y votar acerca de si estamos diciendo o no la verdad.

Si nos creen, no hay de qué preocuparse. Si no, no habrá más remedio que confesar, perdiendo así la posibilidad de hacerse con los recursos y de adquirir esa misma identidad más adelante en caso de haber mentido.

Otra posibilidad es querer llevar a cabo la habilidad de nuestro personaje real. En caso de que no nos crean, habremos ganado la partida directamente. La temática de juegos como La Herencia de Tía Ágata e Incómodos Invitados se combina así con unas reglas que recuerdan a Coup.

Al igual que en este otro juego, se hará necesario poner la cara adecuada ante una mentira. Ella misma será la protagonista en todo el reto, permitiendo llevar a cabo las habilidades de personajes que ni tan siquiera nos pertenecen.

COMPONENTES DE LOS IMPOSTORES

• 7 cartas de Personaje
• 7 cartas de Sospecha
• Carta de Impostor
• 6 hojas de Referencia
• 27 fichas de Recurso
• 27 fichas de Impostor
• Instrucciones