Tras una exitosa campaña de búsqueda de financiación, Ratland acaba de llegar a los mecenas y a las tiendas que apoyaron el proyecto, en su ‘edición Kickstarter’. Es ahora cuando el juego básico se prepara para aterrizar en todas, para llegar a un mayor número de jugadores.

¿EN QUÉ CONSISTÍA RATLAND?

Ratland es un juego de mesa de 2 a 6 jugadores, con competiciones de 45 minutos. Recomendado a partir de los 8 años, es una creación de Eduardo García Martín, con ilustraciones de Ramsés Bosque y Matías Cazorla.

Publicado por Eclipse Editorial, su distribución corre a cargo de Mercurio Distribuciones. Se espera que vaya llegando a las tiendas durante las próximas semanas.

Definido como un juego familiar, convierte a sus participantes en rata. Bajo el lema «piensa como una rata, actúa como una rata, sé una rata», tienen como objetivo dominar la cloaca. Lo harán mediante una eficaz procreación en el criadero y aplastando a los demás clanes.

Ambientado en el vertedero, en la ciudad o en el campo, se hará necesario buscar ricos quesos para alimentar a todo el grupo. Existen dos posibilidades para ello: salir al peligroso exterior o robar las provisiones de las despensas de los vecinos.

Para lograr el éxito, será preciso anticiparse a las decisiones de los demás y jugar con el despiste. Siguiendo una mecánica propia de un «push your luck» y con turnos simultáneos, la competición se estructura en siete fases.

En la de evento se designa a un nuevo jugador inicial, a la vez que se muestran nuevas cartas de evento y de comida. En la de ratas, se sitúan los roedores en las diferentes zonas de la alcantarilla, atendiendo a los intereses propios. Las pantallas de las que dispone el juego permiten hacerlo en secreto.

Es en la de ataques donde se desarrolla la verdadera acción, seguida por la de criadero. Atendiendo a las ratas colocadas en esa zona, el clan aumentará en mayor o en menor medida. En la fase de regreso, la despensa se llena con las ratas envenenadas o perdidas.

Por último, se desarrolla la búsqueda de quesos, en base a las ratas mandadas a esa zona, y se ejecuta la fase de alimento. Deben pagarse los quesos equivalentes al número de ratas en el clan.

Al aparecer la carta de evento de fin de partida, se procede al recuento de puntos. Las ratas vivas, al haber tenido alimento para ellas, otorgan puntos positivos. Las muertas reportan puntos negativos.