Dos juegos con una temática similar pueden ser perfectamente compatibles en el catálogo de una misma editorial si sus mecánicas son distintas. GDM Games publicará, a lo largo de este año, dos propuestas cuya acción reside en las pirámides. Tras mostrar en qué consiste Gizeh!, hacemos lo propio con Mastabas.
LA CONSTRUCCIÓN EN MASTABAS
Mastabas es un juego de cartas de 2 a 4 participantes, con competiciones de 30 minutos, recomendado a partir de los 8 años. Creado por Félix Bernat, cuenta con ilustraciones de Siscu Bellido.
Será en el mes de julio cuando llegue a las tiendas, de la mano de GDM Games. La editorial nos muestra su prototipo para adentrarnos en las catacumbas subterráneas de una pirámide. En nuestro papel de aventureros, el objetivo será llevarnos más tesoros que los rivales. Mientras nos desplazamos, abriremos el acceso a nuevas habitaciones mediante la manipulación de engranajes.
La partida comienza creando el escenario. Se barajan las cartas y se sitúa una en cada extremo. Los peones ocupan la de inicio. Se reparten tres cartas a cada uno. Será en su turno cuando bajen una a la mesa, para añadirla al recorrido, y roben otra. Se repite la misma mecánica hasta alcanzar la última carta.
A la hora de colocar una carta, es obligatorio que esté adyacente a otra ya situada por cualquier esquina. Será decisión del jugador optar por una dirección u otra. Siguiendo las reglas de Piedra, papel o tijera, será necesario vencer a dicha carta.
Es posible que la carta a jugar se coloque adyacente a dos. Sólo en caso de que el símbolo de la nueva venza a las otras dos, se lleva un punto de victoria. Se puede situar de tal forma que gane sólo a una, aunque en este caso, no se llevará el punto.
A continuación, avanza su peón tantas casillas como correspondan al número de la nueva carta, en cualquier dirección. Si consigue acabar su movimiento en una carta del mismo color a la jugada, recibe un punto (nunca podrá regresar a la nueva). De esta manera, una jugada perfecta equivale a dos puntos.
Al llegar al final, tras aplicar la colocación y el movimiento, se termina la partida. Todos se quitan un punto por cada carta de distancia entre el destino y la posición de su peón. El vencedor será quien tenga la mayor cantidad de puntos.
MASTABAS: PRIMERAS IMPRESIONES
El que fuera finalista en el Concurso Ciudad de Granollers de Creación de Juegos 2016 y semifinalista en el Concurso Internacional Boulogne-Billancourt, en 2017, bajo el nombre de Mazmorra Primigenia, es uno de los juegos más prometedores de la editorial.
Su autor presenta una perfecta unión entre construcción y movimiento, de tal forma que se crean turnos rápidos y dinámicos. La mecánica a seguir siempre es la misma, envuelta en la esencia de Piedra, papel o tijera. Sus reglas de colocación son tan sencillas de asimilar como las de movimiento, por lo que podemos centrar toda nuestra atención en escoger el mejor plan.
Por norma general, es preferible aprovechar cada turno en ganar puntos. La atención y la concentración nos llevan a analizar la situación en base a las cartas que se tienen en la mano. La libertad que se concede para colocar la carta en cualquier dirección juega a nuestro favor. Así, sólo tenemos que respetar la regla de adyacencia.
Será fácil encontrar un hueco que cumpla la regla, pero no tanto uno que nos reporte beneficios. Conseguir un punto en la construcción, al vencer a dos cartas adyacentes, puede implicar que el movimiento no sea tan favorable. Lo mismo ocurre a la inversa. Por tanto, la partida debería enfocarse a ese equilibrio constante.
A medida que avance la competición, la toma de decisiones se hará mayor. Alargar el camino hasta la carta de salida puede ser favorable si vamos en cabeza en la puntuación, y todo lo contrario si aún necesitamos tiempo para alcanzar al primero.
Llegados a ese punto, la partida podrá finalizar en cualquier momento, por lo que es fundamental estar preparados. Cada casilla de distancia entre la meta y el peón restará un punto, por lo que conviene no retroceder demasiado. Cada turno podría ser el último, con sus desagradables sorpresas en el recuento.
Por el momento, el prototipo de Mastabas nos muestra como sus reglas son sólidas y funcionan a la perfección. Es rejugable, dado el reparto de cartas, a la vez que aplica la estrategia y la lógica para hacer las delicias de los expertos en juegos de mesa. Serán ellos quienes sorprendan con las jugadas más astutas, no sólo capaces de acercarles a la victoria, sino de guiar a los demás a su antojo.
Los principiantes y los niños se adentrarán en la pirámide valorando su turnos estructurados. Respecto a los beneficios, aparece la identificación constante del espacio, para actuar en base a él, y la mejora en la atención y en la concentración. Se requiere de una mirada en perspectiva.
A tres meses para su lanzamiento, es de esperar que muy pronto descubramos su estética definitiva. Conocemos el aspecto de su portada, pero no de las cartas, ya que las del prototipo muestran a guerreros en la mazmorra por la anterior temática del juego, en lugar de a aventureros en la pirámide. Si continúa recurriendo al colorido como aliado y a los símbolos fáciles de identificar de un solo vistazo, el éxito está asegurado.
Las imágenes pertenecen a su prototipo, por lo que no se corresponden con el diseño final.