Una nueva tecnología ha llegado hasta mi ciudad. Los ciudadanos han quedado divididos por la nueva vía de esta tecnología llamada ferrocarril. Según he podido escuchar, podremos triplicar la recepción de madera y de trigo a mi ciudad, algo impensable a priori. Esto nos ayudaría a crecer y, ya de paso, superar en potencia a los territorios de alrededor.

Ya es el día de la inauguración de la vía y la máquina que para muchos parece haber salido del mismo infierno empieza a rugir. Si me detengo a mirarla, compruebo como es un maravilloso trasto que el ser humano ha inventado a base de engranajes y hierro. Mi sueño es crear un imperio ferroviario cuando amase algo de fortuna…

Por fin tengo en mis manos mis primeras mercancías, mi primer tren y una ciudad dispuesta a contratar mis servicios. Ya me es complicado contar el dinero que tengo, puesto que los dólares ocupan cada rincón de mi vida. Mi ferrocarril se ha expandido por todas las ciudades vecinas, siendo sólo el inicio de un imperio. Analizamos Railroad Corporation, juego de gestión de líneas ferroviarias.

 

RAILROAD CORPORATION EN ACCESO ANTICIPADO

Railroad Corporation nace de la colaboración entre el desarrollador Corbie Games y el editor Iceberg Interactive. Este juego de gestión de líneas ferroviarias acaba de unirse al catálogo de Steam en acceso anticipado, en su versión para Windows. Podemos hacernos con él por 24,99 euros, mientras ayudamos a que siga desarrollándose.

Estamos ante un juego que se asemeja, en mucho aspectos, a otros representantes del género. En este acceso anticipado parece que se han corregido ya pequeños detalles que la comunidad de jugadores ha reportado, basándose en los juegos de la competencia. A primera vista, a falta de más contenido, va por buen camino.

No necesitaremos de mucha potencia en nuestro ordenador en cuanto a procesador, ya que con un Intel Core i3 tendremos suficiente para disfrutarlo. Como en todo juego de gestión, lo que más consume es la RAM. En este caso, precisaremos de 4 GB para soportar, al menos de momento, el buen funcionamiento del juego.

Aún no es compatible con Steam Workshop y, por lo tanto, no soporta mods. Algo con lo que no cuenta por ahora, pero que sí que está en mente de los creadores, es la inclusión del español entre los idiomas disponibles. A modo de resumen, y dado que las comparaciones resultan inevitables, podemos definirlo como un juego más tranquilo que Railway Empire y un juego menos complejo que Transport Fever.

 

LA SENCILLEZ DE LOS TRENES

Como ya sabrán los amantes de la gestión con trenes es que, en ocasiones, suelen complicarse demasiado. Railroad Corporation aprende de sus antecesores para ofrecer una experiencia de juego más simplificada. Eso sí, con numerosa información para el deleite de los jugadores.

Con unos cuantos clics podremos aprender lo básico. Mejor todavía si completamos el breve y didáctico tutorial que se ofrece. No tendremos que preocuparnos por los tediosos semáforos que, en otros juegos convertían la experiencia en lenta a la hora de modificar algo. En este título de Corbie Games se coloca con gran acierto de manera automática. Así, podremos dedicar más tiempo a jugar y no a construir vías con semáforos por un lado y por otro.

La interfaz del juego nos puede descolocar un poco, sobre todo en caso de no conocer ninguno de los idiomas presentes. Ya dentro del juego, la posibilidad de conectar rutas es su mayor acierto. Nos permite conocer, al detalle, las necesidades de cada ciudad. Los colores verde y rojo muestran la producción y los excedentes.

Seleccionando alguna de las mercancías de una zona en color verde, mandamos a nuestro tren a cargar una unidad. Si hacemos lo mismo en otra ciudad que tenga esa misma mercancía en color rojo, la descargaremos. Este sencillo sistema no podrá utilizarse en caso de no tener una estación conectada con otra.

 

LAS CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES

Poco o nada tiene Railroad Corporation que envidiar a otros juegos, aunque tampoco revoluciona el género. Nos anima a levantar un imperio en pleno siglo XIX. Sin embargo, que sea fácil de jugar no significa que el éxito llegue de la noche a la mañana.

De nuestra habilidad dependerá que sepamos sacar rentabilidad a las rutas. No consiste en mandar un tren de un sitio a otro, puesto que la velocidad también será importante. Cuando los trenes vayan cargados, su velocidad se verá drásticamente reducida.

Aparece la posibilidad de mejorar tanto las estaciones de tren como la oficina de empresa situada en nuestra ciudad de inicio. Puede ser ampliada por un dineral, lo que se traduce en nuevo espacio dentro del edificio administrativo. Desembocará en la posibilidad de invertir en investigaciones, con sus ventajas y nuevas locomotoras.

También podemos ver lo que nos está costando cada ruta. No debemos descuidar esta minuciosa observación, puesto que el dinero que se nos permite tener a deber es limitado. Si lo superamos, la partida habrá llegado a su fin.

Por ahora, tan solo tendremos acceso al modo campaña. La parte positiva es que es tan extenso como para entretenernos durante horas y días. Podremos enfrentarnos a esta modalidad desde distintos puntos de vista para descubrir todas las posibilidades.

Tendremos competidores y rivales que nos harán la vida más difícil conforme avancemos en la historia. No faltará la adquisición de trabajadores, con sus bonus para que la empresa sea más eficiente en todos los sentidos. Meteremos presión a los políticos para salirnos con la nuestra, a la vez que invertimos en el mercado de valores para darle un mayor empuje a nuestra economía.

 

LAS FUTURAS MEJORAS

Como juego en acceso anticipado, se esperan muchas mejoras a medio y a largo plazo. El modo libre es una de las más esperadas en el género, ofreciendo un salto de calidad al no estar atados a misiones como en el modo campaña.

También podremos ver, en un futuro, un editor de mapas. Como su propio nombre indica, nos llevará a crear nuestro propio mapa para, después, jugarlo.

Por el momento, no se han dado demasiados detalles sobre las mejoras, además de las ya mencionadas. Parece lógica la inclusión de mapas más grandes, ya que los actuales son pequeños, en cierta medida. También deberían añadirse una mayor variedad de empleados y locomotoras.

 

RAILROAD CORPORATION: CONCLUSIONES

Railroad Corporation nos ofrece, a día de hoy, un juego muy entretenido para prescindir de los agobios y disfrutar tranquilamente. Como ya hemos visto, la automatización en las señales resulta un acierto, puesto que no hay momentos de desconexión de la diversión.

Estamos ante un juego con una base muy buena, que tiene una gran curva de mejora. Su acceso anticipado implica que va a mejorar con el paso del tiempo. Lo que ofrece ahora no tiene nada que envidiar a los juegos ya lanzados del género.

La sencillez y la facilidad para aprender a jugar nos atrapan, así como su estética funcional. La campaña, a falta de más posibilidades, dice mucho a su favor, puesto que es extensa y permite disfrutar del juego de formas distintas.

Los aspectos negativos llegan con el idioma, que se acabará solucionando. También nos encontramos, en determinados puntos, animaciones cortadas bruscamente al llegar dos o más trenes a la misma estación. No tener un modo libre desde el inicio del acceso anticipado puede echar para atrás a muchos posibles jugadores junto a la, por ahora, incompatibilidad con mods.