Recuperar los zafiros y ser el primero en cruzar los cuatro vórtices temporales. Es el objetivo de Carrera Final, juego de mesa lanzado en formato Print and Play, bajo descarga gratuita.
¿CÓMO SE JUEGA A CARRERA FINAL?
Carrera Final es un juego de mesa creado por Jesús Gutiérrez Laura, lanzado bajo el sello Just Game Tacna. Puede disfrutarse en formato físico o digital, con hasta 4 participantes.
Con la primera opción, encontramos un archivo con las reglas y con fichas, cartas y tablero para recortar. Se completa con componentes en blanco para las mentes más imaginativas. Si preferimos no imprimirlo, podemos acceder a él mediante Tabletopia, plataforma dedicada a los juegos de mesa.
Como su propio nombre indica, el objetivo es ser el primer jugador en cruzar la línea de meta. Una explosión en un laboratorio científico secreto, perteneciente a la Organización Mundial Futuro, ha supuesto la pérdida de cuatro zafiros místicos temporales.
Este accidente está causando la llegada de personajes de la antigüedad y de enormes bestias al presente. Para acabar con el caos, los aventureros tendrán que cruzar los cuatro vórtices del tiempo que permitan recuperar los zafiros y devolverlos al lugar del que nunca debieron salir.
El primer paso es crear el escenario, añadiendo un dado de seis caras y un peón por jugador a las fichas, cartas y tablero. Por orden de turno, colocarán las fichas sobre las casillas del tablero desocupadas (otra opción es situarlas al azar).
Cada participante recibe tres cartas. Su turno comienza con el robo de una carta del mazo, como acción opcional. No se podrán tener más de cuatro en la mano. A continuación, lanzará el dado para avanzar el número de casillas marcado.
Si puede, podrá utilizar el efecto de una o más cartas. Al regresar de un vórtice del tiempo, se desarrolla una fase extra, donde robar una carta del mazo o de la mano de un rival para activarla de forma inmediata.
A la hora de avanzar por el escenario, el jugador activa el efecto de la ficha correspondiente a la casilla en la que detenga su movimiento. Llevan a perder un turno, a realizar una nueva tirada, a avanzar un espacio, a retroceder hasta el último vórtice o a tomar un atajo, entre otros efectos. También sirven para ganar inmunidad.
Respecto a las cartas, permiten beneficiarse de las ventajas de las fichas sin necesidad de caer sobre ellas. También anulan efectos y cartas, por lo que pueden utilizarse en el turno de los demás.
Se repite la misma mecánica hasta que alguien cruce los cuatro vórtices temporales y la línea de meta, convirtiéndose en el ganador. Habrá recuperado los cuatro zafiros místicos.
Esta creación, en forma de carrera clásica a contrarreloj, tiene una duración de 15 minutos por partida. La rejugabilidad llega con la disposición inicial de las fichas y con la posibilidad de crear nuevos efectos, combinadas con el azar del dado.
