A principios del pasado año, TasteMaker se lanzaba en PC, mediante Steam, bajo el sistema de acceso anticipado. La idea de su responsable, Jelle Booij, era aprovechar las críticas de la comunidad de jugadores para lanzar una versión final en el primer trimestre de 2022.
Ya en el tercero, comprobamos como esa gran actualización todavía no se ha producido. ¿El motivo? Lo complicado que está resultando implementar un servicio de cocina a esta propuesta de gestión de restaurantes. A los problemas inesperados, se le suma un juego que todavía no es demasiado estable. Por suerte, no todo son malas noticias.
LAS POSIBILIDADES DE TASTEMAKER
TasteMaker no es un juego parado, ni de cerca. Jelle Booij trabaja en el desarrollo con implementaciones más o menos regulares. La comunidad responde con unas críticas que pasan de variadas a muy positivas, sinónimo de que avanza por buen camino. Por muy buen camino.
Ahora bien, ¿qué encontramos en este juego? Se define como una fusión entre la gestión y la simulación, donde administrar todos y cada uno de los aspectos de un restaurante. Hasta aquí nada fuera de lo normal, de no ser por los peculiares extras que ofrece.
Así, atenderemos a la buena música o incluso podremos añadir salas de apuestas. Toman como inspiración el funcionamiento y las reglas clásicas de las salas reales, como podría ser el casino online Mexico, con mesas dedicadas al póquer o a la ruleta. Crupier incluido.
Volviendo a las características generales, la misión es conseguir que nuestros clientes estén contentos. La fórmula pasa por rapidez en el servicio, por unos precios acordes y por una correcta limpieza. Como es lógico, nos encargaremos de la contratación de empleados y de ofrecer la comida más deliciosa.
Rapidez, buenos precios y limpieza
A todos nos gusta que nos traigan los platos a tiempo, sin largas esperas, por lo que cocinar y servir de una forma rápida ya es el primer paso en la búsqueda de la reputación. A la hora de diseñar el menú, prestaremos una especial atención a los platos para que tengan el precio que merecen.
De nada nos servirá obtener beneficios de un único plato. Necesitaremos sacarle provecho a todos, de ahí que unos precios extremadamente altos no nos vayan a funcionar. Ya se sabe, cuanta más fidelidad consigamos, mejores resultados a medio y a largo plazo se lograrán.
La limpieza no podrá disimularse, puesto que las ratas serán el reflejo de nuestro cuidado hacia el local. O, mejor dicho, de nuestra falta de cuidado. Si no limpiamos el restaurante, se ensuciará, atrayendo a ratas. ¿Quién iba a estar satisfecho comiendo alrededor de estas criaturas?
Todo arranca con una pequeña parcela vacía, como viene siendo habitual en el género. Partiendo desde cero, colocaremos paredes, puertas y ventanas. El esfuerzo no tardará en dar sus frutos, puesto que el dinero ganado se traducirá en la compra de más terreno, ampliando el negocio, y en una decoración más sofisticada.
De hecho, la personalización influirá en la propia felicidad de los comensales. Querrán disfrutar de una buena comida en un lugar bonito, por lo que jamás deberemos descuidar este punto. ¡Nada de quedarse en esas cuatro paredes iniciales!
TasteMaker crece a paso lento, pero lo hace de la mejor forma posible. No sólo piensa en los jugadores que prestan su apoyo en este acceso anticipado, sino en todos los que están por venir. Tanto unos como otros merecen la mejor de las experiencias.
Las prisas nunca son buenas, incluso aunque no puedan cumplirse fechas establecidas. Un desarrollador comprometido con su proyecto no lanzaría un juego a medio camino de cumplir con las expectativas.
Su trabajo es similar al de esa persona a cargo del restaurante que acabamos de ver. Tiene la responsabilidad de ofrecer un menú delicioso. De cuidar el envoltorio para llamar la atención en un género más que explotado. De hacer que la espera acabe mereciendo la pena.