Protos y Tipos 2019: el crecimiento de una gran familia

Protos y Tipos 2019

Tres días de testeos, charlas, talleres y mesas redondas. Así se presentaba Protos y Tipos 2019, cita imprescindible con la que se daría la bienvenida al mes de marzo. Contamos todo lo que se vivió, en complemento del vídeo resumen publicado hace unos días.

 

UN REENCUENTRO ENTRE PROFESIONALES

En 2012, se celebraron unas primeras jornadas de Protos y Tipos, con 30 asistentes. En 2019, el número de autores, ilustradores, editores y medios reunidos ha ascendido a 270. El crecimiento es más que evidente, como muestra del aumento de los juegos de mesa en España.

Este año, la cita tuvo lugar en pleno centro de Zaragoza. El Hotel Eurostars Boston sirvió como escenario para una octava edición que comenzaba el viernes 1 de marzo pasadas las cinco de la tarde. Ludo, Asociación de Creadores de Juegos de Mesa y responsable del evento, ya tenía todo preparado.

Protos y Tipos 2019

Los asistentes recogerían sus acreditaciones y su dosier para iniciar la que es ya una tradición: el reencuentro. Los saludos, los besos y los abrazos serían los protagonistas de la tarde y de la noche. Saber cómo había ido el viaje (puesto que los desplazamientos se habían realizado desde todos los puntos del país) y las bromas fueron la primera muestra del buen ambiente que se viviría durante todo el fin de semana.

Puesto que muchos de los allí presentes ya habían coincidido en eventos anteriores, la sensación de estar en familia era constante. La sala donde se realizarían todos los testeos era de un enorme tamaño. Completada con una zona de bar y otra de aperitivos, serían muchos los que no saldrían de ella en horas.

No tardaría en iniciarse la Game Jam, una actividad para la creación de juegos de mesa. Los primeros prototipos tampoco se hicieron de rogar para llegar a mesa, aunque las interrupciones por las constantes llegadas fuesen frecuentes.

Protos y Tipos 2019

Autores e ilustradores de todas las edades mostraban ilusionados sus creaciones. Tuvimos juegos estratégicos y propuestas familiares que bien podían representar buena parte de las mecánicas existentes en el sector. Tras jugar una partida, o un par de turnos si el juego era muy largo, llegaba la hora de hablar sobre lo que se había probado.

Los responsables escucharían atentamente las valiosas críticas de los jugadores. Resultan esenciales a la hora de acertar con la forma definitiva. Una regla incomprensible, una mecánica que no parece funcionar y un diseño confuso tienen arreglo cuando el juego aún es un prototipo.

Quienes hayan asistido a Protos y Tipos alguna vez, sabrán que muchos de esos aportes pueden echar por tierra un duro trabajo. Será necesario recapacitar sobre ellos durante días, para después considerar aplicar algunos cambios. Teniendo en cuenta que quienes las realizan son jugadores expertos, es muy importante tenerlos en cuenta para lograr el juego perfecto. Mejor comenzar de cero que darse cuenta de un enorme fallo cuando ya no hay nada que hacer.

 

LAS CHARLAS Y LAS MESAS REDONDAS

Sabiendo que la sala de prototipos sólo cerraría sus puertas de siete a nueve de la mañana, para su limpieza, los más madrugadores no tardarían en volver a llenarla, ansiosos de seguir jugando. A unos pocos metros, en la Sala Riviera, se celebrarían las charlas que ocuparían toda la jornada.

Paco Gómez (¡Cobardes!, Fiesta de Regalos) fue el encargado de empezarlas, sorprendiendo a los asistentes con la enorme importancia que tienen las matemáticas a la hora de crear un juego de mesa, tanto en mecánicas como en diseño. Le seguiría Jaime González (WAH! Studio), explicando los pasos a seguir desde que terminamos el prototipo hasta su publicación.

Pablo Garaizar (Universidad de Deusto) se centraría en los aspectos psicológicos a la hora de diseñar un juego, teniendo en cuenta lo que la mente humana puede hacer y percibir. Rubén Pastor (King of Hostias) sería el encargado de mostrarnos cómo aplicar técnicas de eficiencia industrial a la creación del juego.

Álvaro Isorna (El Robo del Siglo) ofreció un minitaller, de una enorme utilidad, para crear prototipos en Mac de una manera sencilla. Ramón Redondo (Tempus Fugit Games) cerraría las charlas de por la mañana con humor, explicando cómo se aprende de los fracasos.

Tras realizar la ya tradicional ‘Foto de familia’ y con un parón para comer, la Sala Riviera volvería a abrir sus puertas con la entrega del Premio Eduardo Nevado 2018, concedido a Consola y Tablero. Seríamos nosotros los encargados de hablar sobre la comunicación en los juegos de mesa, tanto para contactar con los medios como para aprovechar las redes sociales.

Mario Pena y Marta Palacio (Safe Creative) relacionaban la creación de juegos de mesa con los derechos de autor. La mesa redonda y el planteamiento de una campaña en Verkami se fusionaron en uno, por falta de tiempo.

Así, Pak Gallego (GDM Games), Santi Santisteban (Tranjis Games), Alberto G. (AGR Priority), Ramón González (El Troquel) y Luis Álvaro (Draco Ideas) debatirían sobre los procesos de producción y las campañas de búsqueda de financiación en base a las preguntas realizadas por los asistentes. Cerraría la sala David Esbrí (Devir), para explicar cómo se publica en Devir.

Al finalizar, la zona del área de juego continuaba llena. Más prototipos por testear, combinados con risas, marcarían la tarde y la noche del sábado. Hay valientes con los que el sueño no pudo, aguantando hasta la madrugada, con la misma ilusión que el primer día.

 

EL SUEÑO Y LA DESPEDIDA

El domingo, el estrés y las despedidas marcarían el último día. Idas y venidas con maletas y las primeras despedidas. El cansancio y el sueño empezaban a hacer de las suyas, pero aún quedaban unas horas para seguir jugando.

Tras la comida, ya eran pocos los que continuaban en la sala. Había viajes muy largos por delante, incluso a las islas, y horas de sueño por recuperar. El bullicio se apagaba para dar paso a las anécdotas, a las conversaciones sobre próximas jornadas, a las conclusiones que muchos habían obtenido del encuentro…

Protos y Tipos 2019

Protos y Tipos 2019 había llegado a su fin. Los autores e ilustradores se llevarían muchas ideas sobre las que trabajar, para seguir con su sueño: la publicación del juego de mesa. Los medios volvíamos con una enorme cantidad de material para mostrar y los editores con nuevos proyectos entre manos.

En ese fin de semana se firmaron contratos. Hubo prototipos perfectos, a los que se supo echar el ojo. Prototipos casi terminados. Las largas horas de creación y testeo por fin empezaban a dar sus frutos, y que ocurra en un marco como éste, es todo un lujo.

Tanto los que descubrían el evento por primera vez como los veteranos tenían una idea clara: volver el año que viene. Este éxito pudo ser posible gracias al compañerismo entre todos los profesionales que asistieron y, por supuesto, al enorme trabajo de voluntarios, coordinadores y junta de la Asociación, por hacer sentir como en casa.

Hay encuentro para largo, y casi con total seguridad, la cifra de asistentes que ahora nos parece muy elevada, acabará siendo ridícula en diez años. Con ello, sólo podemos añadir una cosa más. Gracias Ludo.